A un año del inicio de la nueva administración federal del Gobierno de México, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), avanza en su principal tarea: recuperar la rectoría del Estado en el territorio, atendiendo a la población históricamente olvidada a través de dos programas prioritarios:
1. Programa de Mejoramiento Urbano (PMU): Este año, atendemos colonias y barrios con altos niveles de rezago urbano en 10 ciudades en la frontera norte, cuatro de vocación turística y otras tres con características especiales, a través de tres vertientes: mejoramiento de barrios, acciones de vivienda y certeza jurídica. En materia de vivienda, la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), ha aprobado recursos para realizar 18 mil 453 acciones para mejorar, ampliar o contar con vivienda nueva. En coordinación con el Instituto Nacional del Suelo Sustentable (Insus), se ha beneficiado a 4 mil 692 familias con la entrega de escrituras, para garantizar la certeza jurídica de sus propiedades Se han destinado 4 mil 248 millones de pesos correspondientes a la vertiente de mejoramiento de barrios, con lo que se han puesto en marcha 346 obras; es decir, el cien por ciento de los proyectos para este año ya están en construcción.
2. Programa Nacional de Reconstrucción (PNR): diseñamos un programa con presupuesto y metas. Avanzamos en coordinación con las Secretarías de Educación, Cultura y Salud; con la Conavi y el IMSS. A la fecha se han iniciado 24 mil 599 acciones de vivienda -de un total de 36 mil 599- en beneficio de las y los mexicanos que resultaron afectados por los sismos de septiembre de 2017 y febrero de 2018. Cerraremos el 2019 con un 41% de avance en materia de vivienda y 71% en los sectores de educación, salud y cultura.
Además de tener a su cargo dos programas prioritarios, la Sedatu trabaja en cuatro ejes estratégicos fundamentales:
a) Vivienda: para coadyuvar a garantizar el derecho humano a una vivienda adecuada, presentamos el Programa Nacional de Vivienda (PNV) 2019-2014 -primera estrategia a nivel mundial que incluye los siete elementos para hacer que una vivienda sea adecuada de ONU-Hábitat- y nos fijamos como metas: Disminuir el rezago habitacional en 2.2 millones. Disminuir el costo de los trámites al menos en un 25%. Crecer el 11% en el sector de la vivienda al 2024. Concentramos las estrategias en las regiones donde existe mayor rezago habitacional, como el sur-sureste.
b) Ordenamiento territorial: trabajamos para revertir el hecho de que actualmente, 90% de los municipios en México carecen de planes de desarrollo urbano actualizados, o no cuentan con uno, por eso: Pusimos en marcha el Consejo Nacional de Ordenamiento Territorial. Impulsamos la creación de la Ley de Desarrollo Metropolitano para la Zona Metropolitana del Valle de México y el proceso de armonización de la Ley de Movilidad con las entidades federativas.
c) Política agraria: trabajamos para garantizar el desarrollo y defensa del territorio de los ejidos y comunidades agrarias: Aplicamos estrategias regionales emergentes en contra del despojo de tierras a núcleos agrarios y terrenos nacionales. A la brevedad presentaremos la Política Nacional Agraria (PNA) con la que consolidaremos la coordinación de todas las instituciones que conforman el sector.
d) Transparencia proactiva y combate a la corrupción: asumimos el compromiso de trabajar con los más altos estándares de transparencia; por ello, cada una de nuestros programas y estrategias está acompañada de instrumentos de rendición de cuentas accesibles para toda la población: Cada uno de los programas prioritarios del Gobierno de México que la Sedatu tiene bajo su responsabilidad, cuenta con un micrositio donde las y los mexicanos pueden consultar sus avances. En Congreso de la Unión facultó a la Sedatu a ejecutar obra pública y en un proceso sin precedentes, a través de Compranet, licitó –de cara a la población- cada uno de los proyectos que actualmente se realizan en el marco del PMU. En materia de combate a la corrupción, nos propusimos defender el territorio y recuperarlo de quienes han lucrado con él en beneficio personal. Tenemos en revisión 196 solicitudes de enajenación de predios nacionales, con lo que evitamos una pérdida para el país superior a los 3 mil 200 millones de pesos. Recuperamos terrenos que fueron robados a la nación; por ejemplo, en Puerto Peñasco, Sonora donde, a través de títulos falsos, pretendieron apoderarse de tierras que son de la nación.