Durante la Primera Reunión Nacional de Delegados en la Ciudad de México, el secretario de Desarrollo Social, Eviel Pérez Magaña, convocó a los funcionarios de los 32 estados a continuar su trabajo para mejorar los derechos y condiciones de vida de las familias más desprotegidas.
Gracias al trabajo en equipo, se ha conseguido que entre 2012 y 2016, más de dos millones de mexicanos salieran de la pobreza extrema además de que el porcentaje de población en situación de pobreza, esté en el nivel mínimo histórico de acuerdo a Coneval.
Los Programas Sociales han contribuido a que más niñas y niños pueden asistir a la escuela gracias al apoyo de una beca, a que más personas puedan hacer efectivo su derecho a la alimentación en los comedores comunitarios, que más adultos mayores tengan acceso a medicamentos y alimentos a través de una pensión y que más mujeres emprendan un proyecto productivo:
Prospera, Programa de Inclusión Social, columna vertebral de la política social. continúa impulsando el bienestar de millones de mexicanos con educación, salud y alimentación.
El Seguro de Vida para Jefas de Familia protege a los hijos de 6.7 millones de mamás.
5.1 millones de personas adultas mayores, cuentan ahora con una pensión para cubrir sus necesidades más elementales.
Las Estancias Infantiles empoderan a miles de mujeres que hoy pueden trabajar y capacitarse para mejorar sus ingresos.
En 5,500 Comedores Comunitarios atendemos a más de medio millón mexicanos para que puedan alimentarse de forma sana, suficiente y nutritiva.
Con más de 10 mil lecherías, Liconsa abastece una leche de gran calidad y a bajo precio a 6.4 millones de mexicanos.
Diconsa cuenta con casi 27,000 tiendas rurales, donde las familias que más lo necesitan pueden conseguir los productos de la canasta básica con ahorros que apoyan su economía.
El secretario Eviel Pérez Magaña pidió a los delegados cuidar la instrumentación de estos programas y su apego a lo establecido en las reglas de operación y seguir trabajando en favor de los objetivos de la Estrategia Nacional de Inclusión (ENI).
Gracias a ella, se ha abatido la pobreza extrema en estados como Nuevo León, donde está ya por debajo del 1%; así como en Baja California Sur, Baja California, Colima, Durango, Coahuila, Sonora y Jalisco, donde es menor al 3% de la población.