El Seminario Internacional de Cocinas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) contó con la participación de las investigadoras argentinas Cecilia Trillo y María Laura López, quienes expusieron el papel de las plantas comestibles en la serranía de Córdoba como ejemplo del mestizaje hispanoamericano en la cultura alimentaria. El encuentro fue coordinado por las especialistas Yesenia Peña y Lilia Hernández Albarrán de la Coordinación Nacional de Antropología.
Yesenia Peña destacó que las prácticas de las comunidades en torno a su entorno forman parte de una cultura alimentaria transmitida de generación en generación, lo que refleja procesos sociales, económicos y políticos. López subrayó que platillos tradicionales como el locro son producto del mestizaje cultural y alimentario, con ingredientes que combinan lo indígena y lo europeo.
A través de estudios arqueobotánicos se ha comprobado el consumo de maíz y quenopodios desde hace más de 2,000 años en la región, además de hallazgos en sitios como Quebrada del Real y Cruz Chiquita. Cecilia Trillo explicó que su investigación documenta la permanencia de un núcleo de 40 frutos, cultivados y silvestres, que han sobrevivido a procesos migratorios, urbanización y cambios en la frontera agrícola.
Entre las especies cultivadas destacan maíz, papa, batata, zapallo, poroto y trigo, mientras que de las silvestres sobresalen molle, chañar, algarrobo, piquillín, mistol y ají. Estos productos siguen siendo utilizados en comunidades locales, aunque algunas prácticas tradicionales, como la elaboración de arropes, enfrentan riesgos por la pérdida de conocimientos.
El seminario evidenció cómo la agricultura y la ganadería retomaron recursos originarios e incorporaron innovaciones traídas por los españoles, consolidando un mestizaje alimentario que se refleja en la vida cotidiana. La próxima sesión se realizará el 7 de octubre y estará dedicada a la alimentación de comunidades indígenas en la Amazonia oriental colombiana.