Este martes 24 de septiembre de 2024, el director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, presentó su último informe de gestión durante una sesión ordinaria del Consejo General Consultivo (CGC). Este informe resume los logros alcanzados durante la administración 2018-2024, con un enfoque en el fortalecimiento interno de la institución.
Uno de los hitos más significativos fue la publicación del Reglamento de la Ley Orgánica del INAH en el Diario Oficial de la Federación el 24 de mayo de 2021. Este reglamento define las competencias del INAH en sus cuatro áreas de especialidad: investigación, conservación, difusión. y formación de cuadros, además de establecer la estructura organizativa del instituto y la creación del CGC, que incluye cuatro Consejos de Área.
La administración también se comprometió a mejorar el orden administrativo y jurídico del sector cultural, buscando dejar una herencia institucional más sólida para el INAH. En diciembre de 2021, se llevaron a cabo las primeras elecciones para la constitución del CGC y sus Consejos de Área, lo que representa un avance histórico en la participación de los trabajadores del INAH en la toma de decisiones.
Los Consejos de Área, que funcionan como órganos colegiados consultivos, han estado trabajando para consolidar su estructura interna y establecer una agenda que responda a las necesidades de la institución. En su primera sesión ordinaria en diciembre de 2022, Diego Prieto destacó que el INAH es la única institución gubernamental con un sistema de cuerpos colegiados.
Otro avance importante fue la creación de la Norma para la Investigación Arqueológica en México , que entró en vigor el 11 de junio de 2024. Este documento, resultado de un proceso de análisis exhaustivo, establece directrices para la investigación, salvamento y rescate en arqueología, buscando mejorar los procesos de investigación con base en décadas de experiencia.
El Consejo de Paleontología (ConPal), reactivado en marzo de 2017, también ha desempeñado un papel crucial en la normatividad del patrimonio fósil en México. Durante este tiempo, se han establecido bases y lineamientos para su operación, y se han iniciado proyectos de colaboración con diversas instituciones y comunidades.
Por último, el INAH ha incorporado un enfoque de género en sus programas y procesos, buscando fortalecer la inclusión y la equidad en todas sus actividades. Este enfoque es parte de un esfuerzo continuo por parte del instituto para modernizar y hacer más inclusiva su estructura y funcionamiento.