En un giro crucial para la educación en México, la Secretaría de Educación Pública (SEP) ha confirmado que la Prueba PISA se llevará a cabo en 2025, cumpliendo con una orden judicial emitida por el Poder Judicial de la Federación. La organización Educación con Rumbo, que promovió un amparo para asegurar la aplicación de esta evaluación internacional, fue la encargada de anunciar la noticia, destacando la importancia de esta decisión para el futuro educativo del país.
La sentencia judicial obliga a la SEP a realizar todos los trámites necesarios para que la Prueba PISA se aplique correctamente en las escuelas mexicanas. Según el comunicado emitido por Educación con Rumbo, el Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior (Ceneval) será el encargado de coordinar los trabajos para la realización de la prueba. Se prevé que una prueba piloto se lleve a cabo en octubre de 2024, con el fin de preparar el terreno para la evaluación definitiva que se aplicará en abril y mayo de 2025.
El abogado constitucionalista Miguel Ángel Ortiz Gómez, de la firma Cuatrecasas, elogió la decisión del Poder Judicial, subrayando que esta acción protege el derecho de los estudiantes a recibir una educación de calidad. Asimismo, Ortiz Gómez destacó el papel fundamental del Ceneval en la coordinación con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), asegurando que la prueba se realice bajo los más altos estándares internacionales.
Paulina Amozurrutia, Coordinadora Nacional de Educación con Rumbo, también resaltó la importancia de la participación de la sociedad civil en este proceso. Según Amozurrutia, la implementación de la Prueba PISA será clave para definir las políticas públicas educativas de la próxima administración, liderada por Mario Delgado, quien asumirá el cargo de Secretario de Educación Pública en 2024. La organización ha instado a Delgado a trabajar de manera conjunta en el diseño del Programa Sectorial de Educación 2024-2030, asegurando la participación activa de especialistas de la sociedad civil.
La realización de la Prueba PISA en México representa un paso importante hacia la mejora de la calidad educativa en el país. Este esfuerzo no solo fortalecerá la evaluación del rendimiento académico de los estudiantes, sino que también contribuirá a la formulación de políticas educativas más efectivas y a la creación de canales de comunicación más sólidos entre el gobierno y la sociedad civil.