_ Bajo la dirección artística del maestro Aquiles Morales, el conjunto vocal interpretó temas como Bésame mucho, La sandunga y La traviata
Con una tarde-noche musical que sirvió un coctel de piezas lo mismo del repertorio clásico internacional que del tradicional mexicano, pasando por el gospel y el son veracruzano, el Coro de la Ciudad de México celebró su 55 aniversario en el Antiguo Palacio del Arzobispado.
En el marco del Programa Escenarios Vivos en tu Ciudad 2016, de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, el Coro ofreció un concierto gratuito que comenzó con el Kyrie de la a€œPetite Messe Solennellea€, del compositor italiano Gioachino Rossini.
Dirigido por el maestro Aquiles Morales García, el Coro de la ciudad interpretó magníficamente Gloria all'Egitto, de la ópera a€œAídaa€, a cuyo extracto siguió la sentimental y patriótica Va, pensiero, originalmente escrita como parte de la ópera a€œNabuccoa€, ambas del compositor y cantante italiano Giuseppe Verdi.
Inneggiamo il signor non è morto, himno de Pascua de la ópera a€œCavalleria Rusticanaa€, del autor italiano Pietro Marcagni nacido en 1863 antecedió a la vocalización, a manera de contrapunto, de la Ronda de los enamorados, parte de la conocida zarzuela La del Soto del Parral, musicalizada por los españoles Riveriano Soutullo y Juan Vert a mediados de la década de los años veinte del siglo pasado.
La alegría musical continúo con La verbena de la paloma, zarzuela con música del español Tomás Bretón para la puesta en escena del mismo título estrenada el 17 de febrero de 1894 en Madrid, España; además, su título hace referencia a las fiestas madrileñas en torno al 15 de agosto, cuando se celebra la procesión de la Virgen de la Paloma.
Enseguida de las zarzuelas, el Coro de la Ciudad de México brindó a los asistentes una muestra vocal del gospel estadounidense, al interpretar Rock A Mah Soul, con un arreglo de Charles H. Gilchrist.
La música mexicana y latinoamericana llegó con temas y arreglos tradicionales como Cinco nanas, de Carlos Jiménez Mabarak; Siete haiku, de Jorge Córdoba, así como la mundialmente conocida Bésame mucho, compuesta por Consuelo Velázquez en 1932, cuando tenía 16 años de edad.
Tras las presentaciones de La sandunga, uno de los sones veracruzanos más antiguos, y la bomba ecuatoriana Carpuela lindo, de Milton Tadeo, la tarde musical llegó a su fin con la fastuosa interpretación del clásico de la ópera La Traviata, de Giuseppe Verdi.
El Coro de la Ciudad de México fue fundado en 1961, bajo la dirección del Mayor Antonio Rosado González y de Ernesto Belloc Calvillo, con el propósito de contar con un conjunto vocal de excelente calidad para la interpretación de su acervo musical y difundir la música coral en todas sus manifestaciones, objetivo que se ha logrado en 55 años de actividad artística.
Actualmente, el Coro de la Ciudad de México posee un extenso repertorio que abarca desde la música mexicana, romántica, temas navideños e infantiles, hasta grandes obras corales del repertorio internacional, música clásica y ópera.
La agrupación mantiene una intensa actividad, al presentarse de manera gratuita en diversos espacios públicos, tales como museos, parques, explanadas, teatros, kioskos, entre otros, enriqueciendo la oferta cultural de la Ciudad de México.
