Señalaron que durante las revisiones, el paquete fue detectado mediante rayos x, y con la ayuda de dos perros entrenados se determinó que era una sustancia ilegal por lo que se procedió a pesarla y resultó que eran cerca de 10 kilogramos.
Una vez que se determinó las características de la sustancia y su peso la droga fue asegurada y puesta a disposición de la autoridades competentes

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