_ El paso del huracán John, que ha afectado las costas de México en la última semana de septiembre, ha causado daños significativos en varias estaciones del Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (SASMEX) en Guerrero y Michoacán. Según un informe emitido el 30 de septiembre por el Centro de Instrumentación y Registro Sísmico (CIRES), las afectaciones fueron más notables después del impacto del meteoro.
En la Costa Chica de Guerrero, una de las estaciones sufrió el colapso de sus torres de comunicación el 28 de septiembre, y se estima que la reconstrucción tomará al menos una semana. Mientras tanto, las autoridades han confirmado que el resto de las estaciones están operativas y los altavoces de alertamiento podrían activarse si es necesario.
En Michoacán, cuatro estaciones perdieron su enlace de comunicación el 29 de septiembre, y los especialistas del SASMEX están investigando la causa, considerando la posibilidad de que se haya perdido un repetidor. De un total de 91 sensores en funcionamiento del SASMEX, solo cinco están en proceso de reparación debido a los daños del huracán.
Claudia Sheinbaum, quien asumirá la presidencia de México en las próximas horas, anunció su primer viaje de trabajo a Guerrero para evaluar los daños causados por el huracán John. Este fenómeno ha dejado al menos 16 muertos en el sur del país, especialmente en Acapulco, que ha sufrido graves inundaciones y deslaves.
El huracán John impactó la costa del Pacífico mexicano en dos ocasiones. La primera, como un huracán de categoría 3, trajo lluvias intensas que afectaron Guerrero y Oaxaca, mientras que su reingreso a tierra por Michoacán reactivó su fuerza. Este impacto ha revivido el trauma de los habitantes de Acapulco, que aún recuerdan los estragos causados por el huracán Otis en 2023.
Sheinbaum ha estado en contacto con las autoridades de Guerrero para coordinar la ayuda necesaria y visitará la entidad para supervisar la situación. En la región afectada, caracterizada por altos niveles de pobreza, se han desplegado alrededor de 18 mil agentes, incluyendo militares y personal de salvamento, para ayudar a las más de 3 mil 800 personas que se encuentran en albergues tras ser rescatadas de zonas de alto riesgo.