_ Participarán el Coro y la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, dirigidos por Iván López Reynoso
Con obras emblemáticas de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791) y Gabriel Fauré (1845-1924) para orquesta y coro, la Compañía Nacional de Ópera presentará su segundo concierto presencial en el Palacio de Bellas Artes, en el marco del Programa de Reactivación Musical y de la campaña #VolverAVerte de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
El Coro y la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, dirigidos por Iván López Reynoso, se presentarán el domingo 11 de julio a las 17:00 horas, con un programa que, a decir de su titular, “muestra la doble faceta —sacra y profana— de Mozart y Fauré”.
Dará inicio con el motete Ave Verum Corpus, KV 618, para orquesta de cuerdas y coro mixto, cuyo texto es atribuido al papa Inocencio VI. De una sencilla belleza, fue creado por Mozart en el último año de su vida para ser cantado por el Coro de Baden en la festividad de Corpus Christi.
La Sinfonía núm. 27 en Sol mayor, K. 199/161b fue escrita cuando tenía 17 años, entre 1773 y 1775. Esta obra tiene la influencia de los continuos viajes hechos previamente a Italia por el joven Mozart y su padre, así como el “estilo galante” predominante en las capitales musicales europeas.
Por otra parte, la Pavana en Fa sostenido menor Op. 50, de Gabriel Fauré, era originalmente una pequeña pieza para piano, la cual devino en una de las obras más emblemáticas del catálogo del compositor. Con una hermosa y transparente melodía y con la elegancia armónica característica de la música de Fauré, tiene en su forma pavane la cadencia de esa danza antigua y un espíritu lánguido y melancólico.
Finalmente, la Cantique de Jean Racine Op. 11 tiene su génesis en los años de formación escolar de Fauré. Su versión para coro y orquesta es la más famosa y fue estrenada con la dirección de César Frank, a quien el autor dedicó esta obra.
Tanto la Orquesta como el Coro del Teatro de Bellas Artes se presentarán en formatos reducidos, con piezas adecuadas para estas formaciones; asimismo, la duración del concierto será de aproximadamente 40 minutos. Estas medidas se han adoptado en consonancia con todos los cuidados que el Palacio de Bellas Artes promueve para el reinicio de las actividades presenciales, interrumpidas por más de un año con motivo de la contingencia sanitaria.
El director de Ópera de Bellas Artes, Alonso Escalante, señaló que desde los ensayos preparatorios hasta el concierto mismo, se sigue un estricto protocolo por parte de las dos agrupaciones, en las que se hace uso permanente de escudos acrílicos y mascarillas, incluyendo los pocos instrumentos de aliento que participarán, quienes únicamente dejarán de usarla en el momento de su actuación en cada obra.
El cupo en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes estará limitado a 30% de su capacidad en luneta y anfiteatro, con la aplicación de los cuidados sanitarios que el recinto ha establecido para propiciar el disfrute de estas actividades en un ambiente seguro y confiable para todos. Algunas de estas medidas incluyen la instalación de tapete desinfectante, la aplicación de gel antibacterial y la revisión de la temperatura; asimismo, se solicitará al público el uso permanente de cubreboca y mantener sana distancia.
El programa de mano estará disponible con antelación en las redes sociales del INBAL y de Ópera de Bellas Artes; podrá obtenerse, igualmente, a través de teléfono celular y un código QR que estará disponible al entrar al recinto.