_ México es reconocido a nivel internacional por la aplicación de tamizajes neonatales como estrategia efectiva para la detección, prevención y atención de padecimientos que pueden causar discapacidad o complicaciones, señalaron especialistas al participar en el webinar Tamiz Neonatal Integral, organizado por el Instituto Nacional de Perinatología (INPer) “Isidro Espinosa de los Reyes”.
En este encuentro, realizado en el contexto del Día Nacional de los Tamizajes Neonatales, personas expertas en la materia presentaron detalles de los cuatro tamizajes neonatales establecidos como necesarios en la Ley General de Salud: metabólico neonatal, auditivo, visual y cardiaco, los cuales se realizan en unidades médicas que cuentan con servicios de ginecología y neonatología.
La jefa del Departamento de Seguimiento Pediátrico del INPer, Gloria López Navarrete, resaltó que es necesario que madres y padres de familia de personas recién nacidas soliciten estas pruebas gratuitas para detectar cualquier alteración y evitar que vivan con algún grado de discapacidad o desarrollen enfermedad grave.
En México se realiza el tamiz metabólico desde los años 90 para detectar hipotiroidismo congénito, hiperplasia suprarrenal congénita, fenilcetonuria, deficiencia de biotinidasa, galactosemia y la hiperplasia suprarrenal congénita. En 2013 se amplió para identificar 60 enfermedades. López Navarrete consideró que estos cuatro tamizajes son una estrategia en la medicina preventiva que fortalecen la equidad en la identificación y atención de las enfermedades para toda persona que nazca en territorio nacional.
La coordinadora del Tamiz Neonatal Integral en el INPer, Claudia Flores Robles, detalló que el tamiz metabólico neonatal se realiza a través del análisis en laboratorio de una gota de sangre que se extrae entre el tercer y quinto día de nacimiento de niñas y niños asintomáticos, para detectar y tratar enfermedades endócrinas y metabólicas. Este tipo de evaluaciones se aplica al menos dos veces a niñas y niños que nacieron de forma prematura para descartar cualquier anomalía, debido a que tienen mayor riesgo de desarrollar enfermedades.
A nivel global, una de cada 100 personas nace con alguna de las enfermedades que se detectan a través a través del tamiz metabólico, la más frecuente es el hipotiroidismo congénito. Sobre el Tamiz Cardiaco, el especialista del Departamento de Medicina Materno Fetal del INPer, Alfonso de Jesús Martínez García, dijo que esta prueba se aplica a través de tres métodos: el cardiaco fetal, que se realiza entre las 14 y 28 semanas de gestación a mujeres diagnosticadas con diabetes pregestacional, o que tienen hijos que al nacer presentaron cardiopatía congénita.
El segundo es el tamizaje cardio neonatal, que se realiza en las primeras 24 horas de vida, a través de la medición de la oxigenación en sangre y el tercero es la exploración física de personas recién nacidas. Estas pruebas permiten detectar 27 por ciento de las cardiopatías congénitas En el mundo, una de cada 100 niñas y niños nace con cardiopatía congénita, que ocasionó 261 mil fallecimientos en 2017.
En México son la segunda causa de fallecimiento en recién nacidos. Sobre el tamiz auditivo, la especialista del Departamento de Seguimiento Pediátrico del INPer, Mayra Ramírez Vargas, señaló que el estudio se realiza en las primeras 48 horas de vida, con aparatos no invasivos que miden los decibeles que percibe la niña o el niño. Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que aproximadamente 250 millones de personas a nivel global tienen problemas importantes de audición, aun cuando es posible prevenir o tratar al menos 50 por ciento de estos casos.
Se estima que en el país cerca de 10 millones de personas tienen algún problema auditivo. De ellas, cerca de 400 mil presentan sordera total; al año nacen en promedio cuatro mil niñas y niños con sordera congénita. La neonatóloga del Hospital Militar de Especialidades de la Mujer y Neonatología, Paloma Urueta Cárdenas, se refirió al tamiz visual que permite identificar en minutos problemas que puedan causar incapacidad a corto, mediano y largo plazos.