La Presidenta reafirmó el compromiso de México en su relación con Estados Unidos, dejando claro que la soberanía y dignidad nacionales son innegociables. La colaboración en seguridad y migración se mantendrá, pero sin subordinación a intereses ajenos. Cada acción se tomará en beneficio del pueblo mexicano, respetando la autonomía y los acuerdos binacionales.
Si bien el presidente electo Donald Trump ha hecho declaraciones sobre otros países, México seguirá una ruta de respeto mutuo. La Presidenta confía en que se alcanzarán entendimientos con el gobierno estadounidense, siempre defendiendo la soberanía, sin ceder ante presiones externas.
La prioridad será proteger a los connacionales migrantes y fomentar una relación equitativa que impulse el desarrollo regional. Con esta visión, se apuesta por el diálogo, la cooperación y el beneficio mutuo, sin perder de vista el interés nacional.