El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reforzó su llamado a las personas adultas mayores a mantener hábitos saludables que incluyan ejercicio diario, alimentación equilibrada, control de padecimientos crónicos, manejo del estrés y socialización. Estas acciones, señaló, son fundamentales para prevenir enfermedades discapacitantes y garantizar una vejez activa y digna.
Esta jornada forma parte de la estrategia nacional “2-30-100”, con la que el Instituto fortalece el acceso oportuno a servicios médicos especializados, especialmente en comunidades con alta demanda. La doctora Diana Gabriela García Guerra, especialista en Medicina Física y de Rehabilitación adscrita a la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación “Dr. Victorio de la Fuente Narváez”, explicó que el envejecimiento es un proceso multifactorial en el que influyen la genética, el entorno y los hábitos personales. “No es un proceso homogéneo; cada órgano envejece a ritmos distintos, por lo que las afectaciones varían entre individuos”, afirmó.
Entre las principales enfermedades que pueden generar discapacidad en las personas mayores se encuentran las cardiovasculares, las mentales y las crónicas, como la diabetes y la hipertensión. Sin embargo, la especialista destacó que mantener la movilidad, la interacción social y la actividad física contribuye de manera significativa a preservar la independencia funcional.
El IMSS cuenta con programas como GeriatrIMSS y PrevenIMSS, orientados a la prevención de padecimientos que afecten la calidad de vida. Además, promueve la detección oportuna de cáncer cervicouterino, de mama y de próstata, así como la identificación temprana de enfermedades infecciosas. “El objetivo es que las personas mayores tengan una vejez saludable, independiente y con plena participación en su entorno familiar y social”, concluyó García Guerra.