El Gobierno de México rechazó categóricamente la decisión del Congreso de Perú de declarar persona non grata a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, al considerar que dicha resolución carece de fundamento y responde a motivaciones políticas ajenas a los principios de respeto y no intervención que rigen la política exterior mexicana.
A través de un comunicado oficial, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) subrayó que México no ha intervenido de ninguna manera en los asuntos internos del Perú y que su relación diplomática con ese país se mantiene bajo los principios establecidos en la Constitución y en la Carta de las Naciones Unidas. “México reitera su respeto irrestricto a la soberanía de todos los Estados y reafirma su compromiso con el diálogo y la cooperación como vías para el entendimiento entre naciones”, señaló la dependencia.
La declaración de persona non grata emitida por el Congreso peruano se produjo tras comentarios de la presidenta Sheinbaum en los que expresó solidaridad con sectores sociales y políticos de América Latina que promueven la integración regional. La medida fue interpretada por el gobierno mexicano como una reacción desproporcionada y contraria a los valores diplomáticos.
En Palacio Nacional, la presidenta Sheinbaum evitó responder directamente a la resolución, reiterando que México siempre ha actuado conforme a los principios de autodeterminación de los pueblos, no intervención y solución pacífica de controversias. “México mantiene relaciones de respeto y cooperación con todos los países del mundo”, afirmó.
La Cancillería mexicana indicó que continuará fortaleciendo los lazos con América Latina bajo una visión de solidaridad, justicia y desarrollo compartido, reafirmando que ningún acto político interno alterará la vocación diplomática y humanista del Estado mexicano.