Con la presencia del productor Jacobo Márquez, el Centro Cultural Tijuana, organismo de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, proyectó la película Banda que documenta el lugar central que ocupa la música en comunidades del estado de Oaxaca y el genuino interés que despierta en niños y jóvenes pertenecer a la banda de su pueblo.
Estrenado el año pasado en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara, el documental dirigido por Carlos Armella toma como punto de partida el arraigo de la música de viento en comunidades oaxaqueñas y fue presentado en la Cineteca Tijuana dentro de su programa de Creadores Independientes.
Enfocado en la banda Luz del Rosario, el documental sigue a un conjunto de jóvenes en su travesía por perfeccionar el arte musical, y en algunos casos por aprenderlo, con el propósito de poder presentarse en el Festival de Jazz de Jalisco, y en el camino hacia ese horizonte los jóvenes integrantes de la banda se dan a la tarea de dominar varios estilos hasta que crean un género único al que denominan Oaxajazz.
La sinopsis de la cinta resalta que “Santa Catarina Minas, Oaxaca, es un pueblo afectado por la pobreza y la migración. Pero la creación de su primera biblioteca, una emergente industria mezcalera y un grupo de músicos adolescentes, son ejemplos de los vientos de cambio que soplan en la comunidad. Entre el abandono de la música tradicional de su tierra y la invasión de la música sinaloense, la banda Luz del Rosario emprende un largo viaje al Festival de Jazz de Jalisco, donde la improvisación se convierte en el conductor de su música y de sus vidas”.
La ejemplar actitud del profesor Rangel, director de la banda Luz del Rosario, ofrece al grupo de jóvenes opciones para una vida de crecimiento en la música a partir de la sensibilidad de sus integrantes.
La banda de muchachos, que inicialmente circunscribía su repertorio a la interpretación de música tradicional, no solo fue adquiriendo experiencia y cobrando cierta fama, lo cual los llevó finalmente a ser invitados al Festival de Jazz de Jalisco, lo que potenció la creatividad de los jóvenes oaxaqueños que comenzaron a incursionar en diversos géneros musicales aprendiendo de paso el arte de la improvisación con tan buenos resultados que dieron origen al “Oaxajazz”, según expone la película.
En el transcurso del viaje que registra la cinta, se pudo seguir de cerca la vida de algunos de los jóvenes músicos y su esfuerzo por experimentar con varios géneros a los cuales no estaban acostumbrados, práctica con la cual forjan su propio estilo que mezcla lo tradicional con lo moderno.
Al finalizar la proyección de Banda, el productor del documental, Jacobo Márquez, explicó que en un inicio no tenía intención de crear un largometraje, sin embargo, su trabajo como organizador de eventos permitió vincular a los muchachos de la banda Luz del Rosario con maestros de cursos de jazz y al darse cuenta que esto generaría un gran desarrollo para ellos decidió grabar todo el proceso para así terminar con lo que señaló fueron más de 200 horas de video para editar, hasta dar forma a un documental de 93 minutos.
“La película ha sido exhibida en varios festivales internacionales y fue bien recibida en India, Israel y Francia, entre otros países, y resultó seleccionada por la UNICEF para inspirar cursos de educación musical para niños”, dijo Márquez, al señalar que el próximo mes se exhibirá en la Cineteca Nacional en la Ciudad de México, todo lo cual nos llena de felicidad”.
“Teníamos muchísimos temas de qué hablar; alcoholismo, migración, pobreza, pero yo le mencioné a Carlos Armella, el director, que no quería mostrar una historia triste, sino contar una narración esperanzadora que motivara a las personas que vean este documental; en suma, queríamos decirle a la gente: ¡toca, haz las cosas que te gustan!”, afirmó el productor al dialogar con los espectadores.