_ Al participar en el foro Observancia de los Derechos de Obtentor de variedades vegetales de ornamentales, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, expuso que debe cuidarse la calidad de la semilla y otros atributos logrados a través de años de mejoramiento genético, ya que es uno de los principales insumos del sector. En México existen cuatro mil 903 variedades registradas, de las cuales 556 (11 por ciento) corresponden a cultivos ornamentales como rosas, gerberas, dalias y nochebuenas, entre otras, con un valor de producción de ocho mil 714 millones de pesos, lo que demuestra su alta rentabilidad, destacó. Una parte de las variedades registradas proviene de fitomejoradores mexicanos, quienes, por ejemplo, han generado variedades de cempasúchil, nochebuena, dalia y otras de especies nativas, en donde la innovación constante es necesaria para permanecer y ser competitivos en los mercados, destacó.
Las variedades vegetales mejoradas se adaptan a los efectos del cambio climático, permiten un desarrollo sostenible de la agricultura y generan mayor productividad de las cosechas en beneficio de la seguridad alimentaria, afirmó el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula.
Al participar en el foro Observancia de los Derechos de Obtentor de variedades vegetales de ornamentales, expuso que debe cuidarse la calidad de la semilla y otros atributos logrados a través de años del mejoramiento, ya que es uno de los principales insumos de la agricultura.
Por ello es importante analizar los elementos estratégicos y normativos que permitan la transferencia y el aprovechamiento de innovaciones vegetales de los cultivos ornamentales en el país, con puntal atención en el uso de semilla certificada y el respeto a la propiedad intelectual, anotó.
Expresó el compromiso del gobierno federal con el acompañamiento de los bienes públicos, desarrollo de capacidades y disponibilidad de insumos de calidad (semillas certificadas, fertilizantes y material vegetativo mejorado) para que el campo se mantenga productivo, competitivo, sustentable y equitativo.
Para asegurar la transferencia y comercialización de las nuevas variedades, dijo, es necesario reconocer los derechos de propiedad intelectual de los fitomejoradores y participar en la recuperación de la inversión en la generación de esas variedades, bajo un esquema ganar-ganar de todos los actores de la cadena de valor de cada cultivo.
Una parte de las variedades registradas, abundó, proviene de fitomejoradores mexicanos, quienes, por ejemplo, han generado variedades de cempasúchil, nochebuena, dalia y otras de especies nativas, en donde la innovación constante es necesaria para permanecer y ser competitivos en los mercados.
El embajador de los Países Bajos, Wilfred Mohr, indicó que México es uno de los principales aliados y el tercer productor mundial de plantas y flores ornamentales. Alrededor de 280 variedades registradas aquí provienen de esa nación, como anturio, gerbera y rosas, agregó.
Este foro, dijo, es de vital importancia para que los agricultores accedan a las variedades mejoradas que demanda el mercado y aseguren un esquema de trazabilidad que garantice la calidad y el buen manejo del material de propagación, en beneficio de ambos países.
El director general del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), Leobigildo Córdova Téllez, consideró que México es el gigante dormido en la producción de ornamentales, por lo que recomendó reducir la dependencia de variedades generadas en el extranjero y fortalecer los controles en la propiedad intelectual de las nuevas variedades.
Resaltó que entre las funciones del organismo público están la de atender las necesidades de los representantes de obtentores de variedades de ornamentales y de los productores de estos cultivos, plantear alternativas de solución, mostrar áreas de oportunidad y acceder a mejores semillas.
En el encuentro también participaron el director de Planeación Agrícola de la Secretaría de Agricultura, José Mejía Muñoz; los representantes de la Unión Internacional para la Protección de Obtenciones Vegetales (UPOV), Leontino Rezende Taveira, del Consejo Mexicano de la Flor, Federico Martínez Martínez, y la representante de la Asociación de Obtentores de Holanda, Judith de Roos.