Nacional por: Equipo de redacción Concluye modernización de la carretera San Ignacio-Tayoltita con inversión de 3,170 mdp 2025-08-14

La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) anunció la conclusión al 100% de la modernización de la carretera San Ignacio-Tayoltita, una obra estratégica de 96.2 km que une a Sinaloa y Durango, beneficiará a más de 11 mil habitantes y generará 24 mil 200 empleos. Con una inversión de 3,170.5 millones de pesos, la vía impactará positivamente en la movilidad, el turismo, la economía y el comercio, además de reducir en promedio 10 horas el tiempo de traslado.

La carretera inicia en la cabecera municipal de San Ignacio, Sinaloa, y concluye en Tayoltita, cabecera municipal de San Dimas, Durango, beneficiando a por lo menos 20 localidades. La modernización transformó un camino rural en una vía pavimentada de dos carriles de 3.5 metros cada uno, con un ancho total de siete metros, atravesando la Sierra Madre Occidental y superando retos geográficos como pendientes pronunciadas y barrancas por donde corren el río Piaxtla y sus afluentes.

La obra cuenta con 18 estructuras: 14 puentes, 3 viaductos y un túnel. Sinaloa desarrolló 84.6 km, incluyendo 10 puentes como La Caña (23 m) y La Lechuguilla (142 m), así como Los Frailes, El Candelero, Platanitos, Tenchoquelite, Los Ramírez, Los Brasiles, La Tasajera y Arroyo Seco. Por su parte, Durango construyó 11.6 km que incluyen el túnel El Duranguense (515 m), los viaductos San Ignacio (214 m) y San Isidro (124 m), además del viaducto El Sauz (171 m) con sus puentes Auxiliar I (40 m) y Auxiliar II (30 m), así como los puentes Los Ciruelos (40 m) y El Bandonado.

El titular de la SICT, Jesús Antonio Esteva Medina, destacó que la obra fue concluida durante la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y responde a una demanda histórica de la región minera y forestal, cumpliendo con los más altos estándares de calidad y normas vigentes para garantizar un tránsito seguro.

La modernización de esta vía no solo fortalecerá la conexión con Mazatlán y Culiacán, sino que también detonará el desarrollo económico y social de la región, potenciando su competitividad y mejorando la calidad de vida de sus habitantes.