Durante la conferencia presidencial, se abordó el tema de la colaboración bilateral entre México y Estados Unidos en la lucha contra el tráfico de fentanilo, armas y otros delitos transnacionales. Las cifras recientes indican un aumento en la detención de ciudadanos estadounidenses involucrados en este tipo de ilícitos en territorio mexicano.
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo subrayó la necesidad de que ambos gobiernos trabajen de manera coordinada para frenar el tráfico de drogas que afecta a las comunidades de ambos lados de la frontera. Este enfoque conjunto busca romper con la idea de que la delincuencia organizada es un problema exclusivo de un solo país.
Asimismo, se destacó la importancia de reforzar la inteligencia e investigación, así como el control y revisión en los cruces fronterizos. Con ello, se espera reducir la entrada de armas ilegales a México, que suelen terminar en manos de cárteles.
Los mandatarios de México y Estados Unidos mantienen comunicación para compartir información y mejorar la efectividad de los operativos, a la par de impulsar programas preventivos para reducir el consumo de estupefacientes y apoyar a las comunidades más vulnerables.