El Tren Interurbano México-Toluca "El Insurgente" incorporará a su ruta una obra pionera en la ingeniería mundial: un puente atirantado en curva exclusivo para trenes. Este nuevo tramo, ubicado cerca de la futura estación Vasco de Quiroga, ha sido diseñado con tecnología de punta para garantizar seguridad estructural y eficiencia operativa.
La estructura, de medio kilómetro de longitud, incluye un claro central de 200 metros y dos torres sustentadas por cuatro arpas, cada una con 13 tirantes reforzados con torones de acero. Además, se ha integrado un sistema antisísmico para asegurar su funcionamiento en cualquier circunstancia. Esta etapa del proyecto es realizada en conjunto por la SICT y el Gobierno de la Ciudad de México.
La presidenta Claudia Sheinbaum inspeccionó el avance de obra junto con autoridades federales como el titular de la SICT, Jesús Antonio Esteva, y representantes de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario. Las torres principales, una de 65 metros y otra de 75 en forma de “V”, optimizan la estabilidad del tren en movimiento y reducen significativamente el volumen de obra necesaria.
Este puente representa también una solución ambiental responsable, ya que libra una zona ecológica protegida junto al Bosque de Chapultepec y a la Universidad de la Salud. Con ello se garantiza la conservación de un importante manantial, lo cual refuerza el enfoque sustentable del proyecto.
El Tren "El Insurgente", que tendrá siete estaciones y una velocidad máxima de 160 km/h, ya opera en cinco paradas desde septiembre de 2024. Su etapa final unirá la estación Zinacantepec con Observatorio, en un trayecto de solo 39 minutos que beneficiará diariamente a 230 mil usuarios.