La región del Bajío experimenta un notable incremento en la demanda de espacios industriales, impulsada principalmente por el sector automotriz. Durante los primeros nueve meses de 2024, la absorción neta alcanzó 540,000 metros cuadrados, casi el doble en comparación con el mismo periodo de 2023. Querétaro lidera con un 41% de la demanda, seguido por Guanajuato con 28% y San Luis Potosí con 19%, según datos de CBRE.
El inventario industrial en la región creció 5% anual, cerrando con 14.1 millones de metros cuadrados al tercer trimestre de 2024. Querétaro y Guanajuato destacaron por la incorporación de más de 686,000 metros cuadrados nuevos, consolidándose como polos de desarrollo industrial. Este crecimiento refleja el atractivo de la región para empresas automotrices y de manufactura ligera.
La construcción en el Bajío también mostró un aumento significativo, con 612,000 metros cuadrados en ejecución, representando un alza del 37% anual. De estos proyectos, el 30% son construcciones a la medida ("build to suit") ya prearrendadas. Además, la reactivación de edificios especulativos apunta a satisfacer la creciente demanda derivada del nearshoring y la escasez de espacios en otras regiones del país.
Pese a retos como la infraestructura eléctrica limitada, el Bajío mantiene tasas de vacancia competitivas, con un promedio del 3.4%. Aguascalientes reportó la tasa más baja con 1.8%, mientras que Querétaro registró la mayor con 4.4%, atribuido a la reciente oferta incorporada. Los precios de renta continúan al alza, promediando 5.50 dólares por metro cuadrado al mes, siendo Aguascalientes y Querétaro los más altos.
Con su ubicación estratégica, fuerza laboral calificada e infraestructura industrial, el Bajío sigue consolidándose como una región clave para la inversión industrial, especialmente en sectores como el automotriz y la manufactura ligera.