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Dirigida por Christian Gohmer, tendrá una presentación más este domingo 23 de junio, a las 18:00 horas, en el Teatro Julio Castillo del CCB, de entrada libre.
La historia está basada en el Libro de Daniel, texto del siglo XIII, en el que se narra la caída de la antigua Babilonia.
Solistas Ensamble de Bellas Artes lleva a escena la ópera poco conocida y más antigua de la cual se tiene registro, la Ópera de Daniel (o Ludus Danielis), bajo la versión del compositor británico Edward Lambert, sobre el texto original del siglo XIII. La puesta escénica, dirigida por Christian Gohmer, tendrá una presentación más este domingo 23 de junio, a las 18:00 horas, en el Teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque (CCB). Entrada gratuita.
Una escenografía casi minimalista bastó para llevar al público a un contexto medieval, en el que la música, el canto, la actuación y la narración construyeron la historia basada en el Libro de Daniel (Juego de Daniel o Misterio de Daniel), en el que se narra la caída de la antigua Babilonia. La puesta se remonta a la época en que este drama litúrgico fue escrito: la parroquia de Beauvais en Francia, a principios de 1200.
El drama inicia con un coro, para dar paso al narrador interpretado por el actor Alejandro Camacho, quien adentra al público en la historia: Nabucodonosor ha muerto y su hijo Baltazar está sentado en el trono que rige Babilonia. Éste último osa beber en los vasos sagrados del Templo de Salomón y en plena cena unas runas aparecen en la pared. El rey manda llamar a los adivinos reales para que interpreten las palabras, pero ninguno logra descifrarlas.
Aconsejado por su reina, llama a un antiguo sirviente, Daniel, quien lee la profecía: por su atrevimiento y excesos caerá su imperio. La invasión sucede como fue predicho y Darío el Medo se apodera de Babilonia. Éste último favorece a Daniel, pero los celos de sus compañeros en el gobierno los llevan a labrar un plan para condenarlo: elaboran una ley en la que se condena a todo aquel que adore a un Dios que no es Darío. A pesar de la oposición del rey, quien no se da cuenta de la artimaña, Daniel es arrojado al foso de los leones.
Uno de los momentos más brillantes de la puesta escénica corresponde al tenor Ángel Ruz, quien interpreta a Daniel, cuando su personaje, tras ser salvado de su condena por un ángel enviado por gracia de Dios, restablece con honores su nombre y puesto junto a Darío.
Las actuaciones solistas están a cargo del bajo Emilio Carsi, quien interpreta a Baltazar; la soprano Angelina Rojas, quien personifica a la Reina; el tenor Gustavo Cuautli, como Darío; la soprano Graciela Díaz, como el ángel, y el tenor Rubén Cosme, el cortesano.
Para esta reposición se cuenta con la participación de la violonchelista Luz del Carmen Águila, la oboísta Francisca Ettlin, la violinista Violeta Cahuantzi, el percusionista Edwin Tovar, el guitarrista Rodrigo Cadet y el tecladista Eric Fernández.
