Desentrañan significado histórico de la Conquista a través del Códice Misantla - NTCD Noticias
Martes 23 de abril de 2024

Inicio

-

Nacional

-

Desentrañan significado histórico de la Conquista a través del Códice Misantla

Desentrañan significado histórico de la Conquista a través del Códice Misantla

Desentrañan significado histórico de la Conquista a través del Códice Misantla

_
En el ciclo “Códices del encuentro”, Eduardo Corona detalló que en esta pictografía se asientan aspectos como las primeras alianzas indígenas con Hernán Cortés.

Su lectura explica la Conquista como la disolución del Cem Anáhuac, mediante coaliciones de pueblos que buscaban su independencia de la Triple Alianza.


A través del estudio de códices como el Misantla, un mapa colonial donde se asientan aspectos como las primeras alianzas indígenas con Hernán Cortés, en lo que hoy es la costa y la serranía del centro de Veracruz, se puede explicar el fenómeno de la conquista del Cem Anáhuac (extensión territorial ocupada por el imperio mexica), no como la empresa de unos cientos de españoles, sino de confederaciones indígenas en busca de su independencia.

Así lo expresó el etnohistoriador Eduardo Corona, al participar en el ciclo de conferencias “Códices del encuentro” que se realiza en el Museo Nacional de Antropología, donde explicó que en esta pictografía del último tercio del siglo XVI, están representados personajes de importantes linajes de la región, con la intención de plantear quiénes eran ellos a la llegada de Cortés y la provincia que controlaban, pues pensaban que la alianza con los “venidos del mar” les permitiría conservar su territorialidad, lo que a la postre no sucedió.

En el Códice Misantla, de poco más de 1.60 m por 1 m, “estamos analizando no únicamente un nicho ecológico rodeado de ríos que desembocan al Golfo, organizado conforme una concepción cosmogónica, sino un territorio político.”

En la parte superior del antiguo documento se observa la costa veracruzana, un navío español y a Hernán Cortés frente a un lugar identificado como Quiahuiztlan, cuyo glifo está compuesto por dos elementos: el cerro y coronando a éste una fortaleza, representada por almenas. A los pies de esa elevación se fundó la Villa Rica de la Vera Cruz, cuyo acto —por parte de Cortés— estableció un punto de no retorno en la historia.

Recordó que Hernán Cortés arribó en 1519; los totonacas de Cempoala serían sus primeros aliados, seguidos de sus federados de la sierra, de esa manera pactaron contra el poderío del Altiplano, capitaneado por los tenochcas. De esto fue avisada la federación de Misantla; mientras los señoríos de Paxil y Cipactlan enviaron delegados a Toxtlan, y tras discutirlo, fueron a la Villa Rica de la Vera Cruz para sumarse al acuerdo de los totonacas del sur.

“Para los pueblos de Misantla sí fue importante la rebelión pactada en Quiahuiztlan, asentamiento totonaco también sujeto a la Triple Alianza. A partir de ese momento Cortés tuvo a su disposición 50 mil personas provenientes de 30 pueblos y mantenimiento en términos agrícolas, bastimentos que le permitieron ir tierra adentro hacia Tenochtitlan”, indicó el investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

De acuerdo con Corona Sánchez, el mapa refleja el cambio político que para estos antiguos territorios supuso la alianza con los españoles, porque ya no se concibieron como parte de sociedad mesoamericana y en particular del Cem Anáhuac, sino del reino español.

Lo interesante de estos “códices del encuentro” como el Misantla, “es el registro histórico de su propia realidad en esos momentos, con sus consecuencias, de modo que se implementaron los cambios sociales y políticos derivados de la invasión mercantilista española. La gente de Misantla se verá defraudada, porque su territorio será repartido en haciendas, así como para la ganadería y el cultivo de caña de azúcar, etcétera”.

De forma táctica, Cortés logró subordinar a todas estas sociedades, convirtiéndoles en vasallos del reino: “Él tiene claro que está adjuntando a España todas estas regiones y culturas; pero Xicomacatl, líder de Cempoala, apodado el “Cacique Gordo”, no lo ve así, ya que estaba planteando la independencia del territorio totonaca con respecto al Cem Anáhuac, mediante la utilización de las fórmulas mesoamericanas de alianzas, y que éstas permitirían tener mayor capacidad y fuerza para enfrentarse a los tenochcas.

“La Conquista implicó eso. Los ejércitos se conformaron con pueblos aliados: Tlaxcala, Huejotzingo, Cholula, los xochimilcas, los matlatzincas… no tanto con españoles, que en número eran mucho menores. Y hablamos de guerreros en serio, no eran soldados improvisados, tenían organización bélica, y es esta rebelión indígena la que provoca la disolución del Cem Anáhuac. No es la conquista. En todo caso deberíamos analizar la defensa de Tenochtitlan”.

Corona, quien fue curador de la Sala Teotihuacan del Museo Nacional de Antropología (MNA), concluyó que la Conquista no fue sólo militar, sino que implicó una relación de subordinación y sumisión de las sociedades indígenas, las cuales buscaban, originalmente, aprovecharse de la situación, tener un punto de unión para enfrentarse a los mexicas.

El ciclo “Códices del encuentro” continuará el próximo martes 23 de julio en el Auditorio Fray Bernardino de Sahagún del MNA, con la conferencia Los cantos nahuas de la Conquista, a cargo del doctor Salvador Reyes Equiguas, investigador del Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la UNAM.


Reacciones