_ La izquierda mexicana ha logrado un triunfo contundente al conservar este domingo su bastión en Ciudad de México. Clara Brugada, del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ha sido elegida como jefa de Gobierno por los próximos seis años. Brugada obtuvo entre el 49% y el 52% de los votos, superando al panista Santiago Taboada, de la alianza Va por CDMX, quien logró entre el 37% y el 40%. Salomón Chertorivski, de Movimiento Ciudadano, quedó en un distante tercer lugar con entre el 6% y el 9%.
“La mayoría ha decidido votar para que continúe la transformación de México”, celebró Brugada tras una jornada electoral casi sin inconvenientes y con una alta participación del 68%, casi 8 puntos por encima de la elección presidencial. Taboada reconoció la derrota poco después de la difusión de los primeros datos oficiales, deseando éxito a Brugada y prometiendo seguir trabajando por el futuro de la ciudad. A pesar de la cerrada contienda, la izquierda logró mantener el control, apoyada por una alta participación ciudadana.
Brugada, de 60 años, ha dedicado la mitad de su vida a trabajar por la Ciudad de México, la metrópoli de habla hispana más grande del mundo. Con una carrera que incluye roles como diputada federal, legisladora local y tres veces alcaldesa de Iztapalapa, Brugada ha sido una figura destacada en la política local. Economista de formación, comenzó su carrera como activista en los barrios más pobres, trabajando de cerca con referentes de la izquierda nacional como Andrés Manuel López Obrador.
El triunfo de Brugada en la capital mexicana, el segundo distrito con más votantes después del Estado de México, es un reflejo del panorama político favorable para Morena. La ciudad no solo ha respaldado a Brugada, sino también a Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ser elegida presidenta de México. Este apoyo ha tenido un impacto significativo en las elecciones locales, donde Morena también ha obtenido victorias en la carrera presidencial, el Senado y el Congreso de los Diputados.
La oposición, liderada por Taboada, no logró canalizar el descontento de una parte de la población hacia el movimiento obradorista, ni replicar el éxito electoral de 2021. A pesar de enfocar su campaña en la crisis del agua y la inseguridad, la oposición no convenció a los votantes, en parte porque la capital ha reducido los índices delictivos en la última administración. Brugada, comprometida con la seguridad y el urbanismo, tendrá que enfrentar estos desafíos mientras lidera la capital en los próximos seis años.
