HOMENAJE DEL GOBIERNO DE LA CIUDAD A JOSÉ SARAMAGO EN EL CENTENARIO DE SU NATALICIO - NTCD Noticias
Jueves 28 de marzo de 2024

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HOMENAJE DEL GOBIERNO DE LA CIUDAD A JOSÉ SARAMAGO EN EL CENTENARIO DE SU NATALICIO

HOMENAJE DEL GOBIERNO DE LA CIUDAD A JOSÉ SARAMAGO EN EL CENTENARIO DE SU NATALICIO

HOMENAJE DEL GOBIERNO DE LA CIUDAD A JOSÉ SARAMAGO EN EL CENTENARIO DE SU NATALICIO

_ Con la presencia de la jefa de Gobierno, la doctora Claudia Sheinbaum; de Pilar del Río, viuda del escritor portugués; del embajador de esa nación europea en México, Joao Caetano da Silva, y de la titular de la SECTEI, la doctora Rosaura Ruiz Gutiérrez, entre otros, se inauguró un monumento y una sala de lectura en el Jardín de las Naciones Unidas

En el Jardín de las Naciones Unidas y en el centenario de su natalicio, el gobierno de la Ciudad de México ofreció un homenaje a José Saramago, Nobel de Literatura en 1998 con la puesta en marcha de una plaza de la lectura y de un monumento en su honor.

En la confluencia de Reforma y Circuito Interior, estuvieron la jefa de Gobierno, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo; Pilar del Río, traductora y viuda del escritor; el embajador portugués Joao Caetano da Silva, además de la doctora Rosaura Ruiz Gutiérrez, secretaria de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI); el director del FCE, Paco Ignacio Taibo II, y el secretario de Obras, el doctor Jesús Esteva Medina, entre otros.

Momentos antes de la develación de la placa respectiva, la doctora Sheinbaum Pardo, puso de relieve el humanismo del autor que, si bien fue portugués, tuvo mucho de mexicano, expresó

En forma especial, señaló que, como muchas personas en el orbe, ella se refugió en los textos del portugués para encontrar el tono que permitiera hablar de su grandeza como escritor, de su legado y el agradecimiento que tiene México por su solidaridad y compañía en momentos clave de la lucha de su pueblo. Particularmente, aludió a los sucesos del 22 de diciembre de 1997, en Acteal, municipio de Chenalhó, Chiapas, donde fueron ejecutados 45 indígenas tzotziles y resultaron heridas 26 personas, hechos por los que, cuatro días después, Saramago anunció su viaje a México para cumplir compromisos y expresar también: “Otra obligación me conducirá a Chiapas, esa obligación es moral”

También –rememoró- el 19 de marzo de 1998, en representación del Parlamento Internacional de Escritores, el Nobel firmó el acuerdo que convirtió a esta metrópoli en “ciudad refugio”. Ha transcurrido casi un cuarto de siglo desde aquella visita a México y un siglo de su nacimiento. Regresó varias veces dejando siempre estelas de palabras llenas de dignidad y aprendizajes, humanas y poderosas, expresó la mandataria local. En su mensaje, la doctora Ruiz Gutiérrez externó que, con este espacio, el gobierno de la ciudad hace un reconocimiento indispensable a quien fuera uno de los creadores verbales más original y entrañable del siglo XX

En especial, evocó que Saramago se forjó como escritor en eso que alguna vez llamó “el duro oficio de vivir”, es decir, en el conocimiento profundo de las condiciones de vida de los sectores más vulnerables y desprotegidos de la sociedad, de los que él mismo procedía. Buena parte de su vida transcurrió en la dictadura salazarista, una de las más largas del siglo pasado, dijo. Ganador del Nobel en 1998, detalló, su obra está marcada por un profundo sentido de compromiso social que nunca cedió al localismo o a la denuncia política coyuntural. Su literatura, abundó, recurre con frecuencia a la alegoría, se desborda de toda referencia a lo inmediato y sirve como un espejo de la condición humana y de las contradicciones más dolorosas de la sociedad

Así, su producción literaria no se deja encasillar en alguna escuela específica, porque forma parte de ese raro linaje de escritores del que son célebres Franz Kafka, Albert Camus o Fernando Pessoa (tan admirado por Saramago), que llevaron las posibilidades del lenguaje a sus límites para comprender la situación del ser humano, de extraordinarios desarrollos civilizatorios y también de aterradores actos de barbarie y violencia. La literatura –definió-, no sólo revoluciona el lenguaje con formas insospechadas de expresión, sino que despierta la conciencia del lector hacia la indignación. La preocupación por el ser humano en Saramago, continuó, será motivo constante de denuncia, y baste recordar palabras finales de Ensayo sobre la ceguera: ‘Creo que estamos Ciegos, Ciegos que, viendo, no ven”.

“En la medida en que la literatura interpela al otro se nos aparece como una búsqueda de bondad y empatía que puede hacer frente a ese mundo -mitad ruindad, mitad indiferencia- que Saramago reconoció en las dictaduras y en el corazón de las democracias modernas”, asentó la doctora Ruiz Gutiérrez. También, la titular de la SECTEI recordó la visita del escritor portugués a Acteal, de la que escribió: “De Chiapas me llevo no sólo el recuerdo, me llevo la palabra misma... Chiapas (...) Si tenemos conciencia, pero no la usamos para acercarnos al sufrimiento, ¿para qué nos sirve la consciencia?”. Las palabras, apuntó, nos enseñan que constituyen un instrumento de comunicación y un camino que nos conduce a nuestra propia humanidad

En su intervención, Pilar del Río, también presidenta de la Fundación que lleva el nombre del autor luso, expresó que la de hoy no ha sido una mañana más porque se ha recordado a un contemporáneo que habría cumplido en estos días cien años y al que se le celebra con emoción y alegría, sentimientos que junto a la conciencia y la responsabilidad son atributos que distinguen a los humanos de otros seres vivos. Así, hoy se ofrece un testimonio de Saramago en su paso por México, país al que llegaron sus libros y donde él mismo se fue quedando de tal manera que en este día y como consecuencia de tantos afectos, se inaugura el espacio, que es, como la literatura y el amor, un lugar dispuesto para los encuentros

“Él no se fue de México, está presente en muchas casas, en las bibliotecas públicas y en los centros de enseñanza del país que leen La caverna, lo estudian y luego reflexionan sobre quiénes somos nosotros, hombres y mujeres, sin otro don que la vida en la sociedad de consumo, que es el marco en el que nos movemos (…)”

También, describió las largas caminatas que hacía por las calles de la ciudad, los sitios que visitaba y las frecuentes apariciones en las casas de sus amigos, fuera al sur o al norte de la capital. Se refirió a la declaración de deberes humanos que propuso hace 24 años en Estocolmo, instrumento que después lo asumió México a través de la UNAM y que fue lanzado al mundo como una forma de frenar el caos, y exigir el respeto a los derechos humanos, sin discriminación alguna

El representante de Portugal en el país, Caetano Da Silva, felicitó a la jefa de Gobierno por la obra arquitectónica realizada en un tiempo récord de tres semanas. Recordó que, al recibir el Nobel, Saramago acentuó la importancia de los espacios públicos de lectura. Mientras, subrayó, el autor se describía como el adolescente que tuvo también buenos maestros de arte poética en las largas horas nocturnas que pasó en bibliotecas públicas, leyendo al azar sin alguien que lo aconsejara

“El espacio dlectura instalado en este jardín será uno de libertad, como decía Saramago, de leer en libertad, libertad creadora de inventar lugares, libertad de soñar”. Paco Ignacio Taibo II anunció lo que llamó una de las operaciones de fomento a la lectura más grandes que se llevarán a cabo en el país. A lo largo de 15 días se recorrerán 61 colonias de la capital, sobre todo de bajos recursos, altos niveles de inseguridad y pobreza para obsequiar libros a los jóvenes entre 12 y 20 años, principalmente

En este periplo se regalarán 256 mil 186 ejemplares, textos de la colección popular, clásicos, de divulgación de la ciencia y novela. Este programa inició hoy en el mismo espacio de lectura inaugurado este día, especificó.

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