_ A partir de diciembre, México comienza a experimentar los días más fríos del año, con temperaturas que pueden afectar la salud de la población, especialmente en grupos vulnerables como niños, adultos mayores y personas en situación de calle. Expertos en salud advierten que mantener una buena alimentación, abrigarse adecuadamente y vacunarse son medidas clave para prevenir enfermedades respiratorias durante la temporada invernal.
Según el estudio “Cambios en la mortalidad por eventos climáticos extremos en México entre 2000 y 2015”, de los investigadores José Alfredo Jáuregui Díaz, María de Jesús Ávila Sánchez y Rodrigo Tovar Cabañas, se registraron 4 mil 177 muertes por desastres meteorológicos, de las cuales el 20.2% correspondió a frío extremo, principalmente en adultos mayores y hombres. Los autores señalan que el cambio climático incrementará la frecuencia e intensidad de las olas de frío, por lo que es necesario reforzar los programas de prevención.
Las zonas más afectadas por el frío prolongado en México se encuentran al norte, cerca de la Sierra Madre Occidental, y en el centro del país, en regiones como el Ajusco, Cofre de Perote y el Pico de Orizaba. En estos lugares, las bajas temperaturas ponen a prueba los mecanismos corporales de regulación térmica, entre ellos la vasoconstricción, el aumento de la frecuencia cardíaca y el temblor muscular, que ayudan a conservar el calor corporal, explicó el doctor Daniel Pahua Díaz, de la Facultad de Medicina de la UNAM.
El especialista advierte que la exposición prolongada al frío puede provocar hipotermia, una condición en la que la temperatura corporal desciende por debajo de los 35 °C. En casos leves, se presentan temblores y dificultad para hablar; en moderados, fallas cardíacas y alteraciones de la conciencia; y en los severos, con temperaturas menores a 28 °C, puede ocurrir gangrena o incluso la muerte por enfriamiento.
Para prevenir complicaciones, se recomienda cubrir adecuadamente las vías respiratorias, usar prendas térmicas, consumir líquidos calientes, hidratar la piel, mantener una dieta equilibrada, evitar cambios bruscos de temperatura y aplicarse las vacunas contra influenza, neumococo y COVID-19. La Secretaría de Salud recuerda que el autocuidado es fundamental para enfrentar el invierno con salud y bienestar.
