_ El secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla Trejo, aseguró que el protocolo de seguridad del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, —asesinado recientemente— no falló, y precisó que será la Fiscalía General del Estado (FGE) la que determine las responsabilidades correspondientes. Durante la conferencia matutina encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, explicó que el protocolo diseñado por la Guardia Nacional estaba vigente, aunque no se aplicó completamente debido a que el edil no aceptó el esquema de protección propuesto.
“El protocolo no falló, falló el otro. Hablo del protocolo de nosotros, de la Guardia Nacional. Lo que vamos a hacer es concientizar más a las personas que serán resguardadas para que cooperen con la implementación de estos mecanismos”, señaló el general Trevilla. Agregó que si el alcalde hubiera aceptado la protección de la Guardia Nacional, que cuenta con personal capacitado en resguardo de funcionarios, su nivel de seguridad habría sido mayor.
Por su parte, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, informó que no se descarta ninguna línea de investigación, aunque el móvil principal apunta a la delincuencia organizada. Subrayó que la Fiscalía General de la República (FGR) mantiene autonomía en sus decisiones, pero existe coordinación constante con el gobierno federal. “Hasta el momento, todo indica que se trata de un ataque de la delincuencia organizada, pero continuamos con los peritajes y declaraciones”, puntualizó.
En relación con el Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, el titular de la Sedena anunció un nuevo esquema de mandos especiales, mediante el cual un solo comandante podrá coordinar tropas de distintas regiones para mejorar la respuesta ante situaciones de riesgo. Además, se establecerán filtros carreteros, puestos de control y patrullajes especializados para garantizar la seguridad y libre tránsito de la población.
Trevilla adelantó también que se desplegarán células de detección de explosivos y vehículos antiminas en los límites de Michoacán y Jalisco, ante información sobre la presencia de artefactos en caminos rurales. “Se enviarán detectores y carros antiminas para reforzar la seguridad en las zonas de mayor riesgo”, concluyó.
