La celebración de la Independencia de México es una de las fiestas más esperadas por millones de mexicanos. Cada 15 y 16 de septiembre, el país se viste de verde, blanco y rojo para conmemorar el inicio de la lucha por la libertad en 1810. Si estás planeando vivir estas fiestas patrias de manera especial, hay destinos históricos y culturales que ofrecen experiencias únicas.
Uno de ellos es Dolores Hidalgo, en Guanajuato, considerado la cuna de la Independencia. Allí, el cura Miguel Hidalgo dio el histórico Grito de Dolores. Durante las celebraciones, el pueblo se llena de música, desfiles y un ambiente patriótico inigualable, con sitios emblemáticos como la Casa de Hidalgo.
La Ciudad de México también es un referente, ya que el Zócalo capitalino reúne a miles de personas para escuchar el Grito encabezado por el presidente desde Palacio Nacional. La fiesta incluye fuegos artificiales, música en vivo y una atmósfera festiva que transforma a la capital en el corazón de la celebración nacional.
Querétaro, lugar donde se gestó la conspiración que dio origen al movimiento, ofrece una amplia agenda cultural, desfiles y actividades en su Centro Histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad. Otro punto clave es San Miguel de Allende, con su arquitectura colonial y su ambiente bohemio, donde se organizan coloridos desfiles y ferias que atraen a visitantes de todo el mundo.
Finalmente, Cholula, en Puebla, con su famosa pirámide y sus 365 iglesias, ofrece una combinación de historia, feria tradicional y música de mariachi que hacen de este destino un lugar ideal para celebrar. Cada ciudad refleja el orgullo mexicano y la riqueza cultural que caracteriza a estas fiestas.
La Independencia de México fue el resultado de un proceso político y social que puso fin al dominio español y dio origen al Primer Imperio Mexicano. Hoy, cada celebración honra esa memoria histórica y fortalece la identidad nacional.