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La Agencia de la ONU para Refugiados (ACNUR) dio a conocer que los migrantes en México, sólo podrán trabajar en proyectos federales y vivir en siete de las 32 entidades de la República, como nueva disposición del gobierno federal para los portadores de la Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias.
Los gobiernos de Tabasco, Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Yucatán, Quintana Roo y Campeche son los únicos que aceptaron la entrada de migrantes.
Los centroamericanos no podrán viajar por todo el territorio mexicano. “Son candados”, aseguran autoridades del municipio de Suchiate.
De acuerdo con la orden que dio la Secretaría de Gobernación, la entrada se les impedirá en los retenes permanentes en las entradas de cada ciudad, haciendo respetar lo estipulado en la política migratoria. Sin embargo, las personas responsables del trámite de la tarjeta no informan a los migrantes de la caravana de esta nueva medida.
Otra de las disposiciones del gobierno mexicano es que el Programa de Ocupación Emergente tendrá como objetivo la rehabilitación de espacios públicos en el municipio de Tapachula y Suchiate.
Las personas que se inscriban se irán turnando para que puedan trabajar de dos a tres horas diarias, ante la insuficiencia de material para realizar las actividades.
Uno de los temas más delicados con el fenómeno migratorio es la seguridad. La semana pasada, pobladores de Suchiate solicitaron incrementar los patrullajes policiacos.
