No es secreto que la clave de una vida saludable es también el darle tiempo al organismo de regenerar y recargar la energía desgastada durante nuestras actividades ejercidas en el ciclo de vigilia.
Dormir poco y mal estuvo asociado con algunas complicaciones de salud, según publica el equipo en "Sleep Medicine".
Dormir menos de siete horas y media al día podría repercutir en un mayor riesgo de infarto cardiaco, según un estudio de la Universidad Médica de Jichi en Tochigi (Japón) que se publica en la revista 'Archives of Internal Medicine'. Además, los investigadores también muestran en su estudio que una combinación de periodos de sueño entrecortados y de presión sanguínea alta durante la noche parece asociarse con un mayor riesgo de la enfermedad.
Las personas que duermen menos de seis horas por noche son dos veces más propensas a tener la presión y el colesterol elevados, lo que nos eleva el riesgo cardiovascular.
El descubrimiento se adjudica a investigadores del centro médico universitario de Chicago quienes han demostrado que una hora más de sueño al día protege las arterias coronarias de los depósitos de calcio en el endotelio vascular, uno de los indicadores de complicaciones cardíacas. El estudio fue concluyente, dormir una hora diaria más disminuye en un 33% las posibilidades de calcificación en las arterias coronarias y por tanto, el riesgo de infarto. Los investigadores señalan al cortisol, la hormona del estrés, como la posible responsable. En conclusión, que dormir resulta ahora, además de relajante, un método profiláctico para evitar los infartos.