_ La Ciudad de México reafirmó su liderazgo como capital de los derechos y las libertades al desplegar en el Zócalo la bandera LGBTIQ+ más grande del mundo, en una emotiva jornada que reunió a más de 6 mil personas como parte de las celebraciones del Mes del Orgullo 2025. La acción fue encabezada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, quien destacó el evento como un acto de paz, inclusión y respeto a los derechos humanos.
Durante su mensaje, Brugada subrayó que levantar esta bandera en el corazón de la capital representa una exigencia por el respeto a ser y amar en libertad. “Hablar de paz es hablar de la exigencia del respeto a la otra persona, a ser como quiera ser y quien quiera ser”, enfatizó, al tiempo que ratificó el compromiso del gobierno capitalino con la diversidad y la no discriminación.
La bandera fue formada por personas previamente registradas, quienes vistieron camisetas y sombrillas con los colores del arcoíris, llenando de color la plancha del Zócalo en una coreografía que simbolizó unidad y memoria histórica. En el evento también participaron representantes de la Secretaría de Cultura y de la Unidad de Atención a la Diversidad Sexual (UNADIS), quienes destacaron que este acto reconoce las luchas pasadas y promueve una ciudad donde todas las identidades tengan cabida.
La secretaria de Cultura, Ana Francis López Bayghen, aseguró que toda la programación cultural se enfocará en la inclusión de todas las poblaciones, mientras que Hilda Téllez Lino, titular de UNADIS, subrayó que cada color representa la resistencia y dignidad de quienes han luchado por la igualdad. “Somos mucho más que un color que nos une”, dijo con firmeza.
Este despliegue monumental no solo fue un símbolo visual, sino también un poderoso mensaje político y social: la Ciudad de México es y seguirá siendo capital del orgullo, de la paz y de la transformación. El acto refuerza el compromiso de construir un espacio donde la diversidad sea celebrada como parte fundamental del tejido social.
