_ Ante la posibilidad de que Estados Unidos imponga un arancel del 25 por ciento a productos mexicanos, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, informó que esta medida perjudicaría directamente a millones de familias estadounidenses. Explicó que artículos como automóviles, computadoras, televisores y refrigeradores verían un incremento inmediato en sus precios, afectando la economía familiar del país vecino.
El funcionario subrayó que México es uno de los principales exportadores para el mercado estadounidense, por lo cual las tarifas tendrían un impacto expansivo en las cadenas de suministro. Autos y autopartes, frutas y verduras, carne y cerveza, así como la producción electrónica y electrodomésticos, se encarecerían drásticamente en los supermercados y concesionarios de Estados Unidos.
Ebrard resaltó que, de un día a otro, los consumidores del otro lado de la frontera enfrentarían un incremento de 25 por ciento en diversos bienes de uso cotidiano. El golpe económico no se limitaría a la población fronteriza, pues ciudades y estados como California, Texas, Florida y Arizona también se verían afectados de forma notoria.
Concluyó que imponer nuevos aranceles constituye un error estratégico, ya que repercute tanto en la competitividad de las empresas norteamericanas como en el bolsillo de sus ciudadanos. Por ello, el Gobierno de México insiste en un diálogo respetuoso que promueva el libre comercio y beneficie a ambas naciones.
