_ La inflación interanual en México registró un incremento durante la primera mitad de junio, lo que refuerza los argumentos para que el Banco de México mantenga su tasa clave en un 11% en su próximo anuncio de política monetaria. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en un 4.78%, superando el 4.59% de la segunda mitad de mayo. Este resultado también estuvo por encima de las expectativas de los analistas, que preveían una tasa del 4.70%.
El INEGI también informó que la inflación subyacente, que excluye productos de alta volatilidad y es considerada un mejor indicador de la tendencia general de los precios, ascendió a un 4.17%. Este aumento en la inflación subyacente sugiere una presión inflacionaria persistente en la economía mexicana, que el Banco de México deberá considerar en su próxima decisión sobre la política monetaria.
El Banco de México dejó la tasa referencial en un 11% el mes pasado, después de una reducción en marzo, la primera desde el inicio de su ciclo restrictivo a mediados de 2021. La institución ha indicado que evaluará el panorama inflacionario antes de decidir sobre futuros ajustes en el costo del crédito. No obstante, economistas señalan que el reciente debilitamiento de la moneda mexicana, que ha caído un 6.5% en lo que va de junio tras las elecciones, podría influir en la decisión de mantener la tasa sin cambios.
Según una encuesta del grupo financiero Citibanamex, la mayoría del mercado espera que el Banco de México mantenga la tasa de interés en su nivel actual durante su próxima reunión programada para el jueves, aunque algunos anticipan posibles recortes a partir de agosto. Este escenario refleja las preocupaciones sobre la inflación y el impacto de la devaluación del peso frente al dólar, que aún no muestra signos de una crisis, según académicos de la UNAM.
En los primeros 15 días de junio, los precios aumentaron un 0.21%, mientras que el índice subyacente arrojó una tasa del 0.17%, informó el INEGI. Entre los productos que más incrementos registraron se encuentran el chayote, la naranja y los plátanos, mientras que los precios del jitomate, el chile serrano y los paquetes de internet, telefonía y televisión de paga experimentaron las mayores disminuciones.
