_ El Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), perteneciente a la Secretaría de Salud del Gobierno de México, celebra hoy 79 años de liderazgo en atención médica, investigación científica y formación de especialistas comprometidos con la salud de las y los mexicanos. Desde su fundación en 1946 como Hospital de Enfermedades de la Nutrición, la institución ha evolucionado hasta consolidarse como uno de los centros más importantes del país en medicina de alta especialidad.
En 1978, el hospital adoptó el nombre de Instituto Nacional de Nutrición Salvador Zubirán, en honor a su fundador, y en junio del año 2000 incorporó el término de Ciencias Médicas, reflejando su carácter integral y su contribución al desarrollo científico. Bajo la dirección del doctor José Sifuentes Osornio, el instituto brinda atención de tercer nivel a personas adultas, especialmente aquellas sin seguridad social, con un enfoque en diagnósticos complejos y tratamientos de alta especialidad.
Durante 2025, el INCMNSZ ha otorgado atención a 245 mil 161 pacientes en diversas especialidades como Medicina interna, Reumatología, Oncología, Urología, Neurología, Cardiología, Nutriología clínica y Endocrinología. Además, ha realizado más de 72 mil estudios de diagnóstico y 7 mil 620 cirugías, junto con 111 trasplantes de órganos, entre ellos 44 de riñón, 38 de hígado, 28 de médula ósea y uno de páncreas.
La institución también se distingue por su labor científica en áreas como biología molecular, virología, enfermedades autoinmunes, nefrología, oncología y nutrición. Participa activamente en programas de investigación sobre COVID-19, VIH, hepatitis y lupus, además de proyectos sobre microbiota intestinal, obesidad y enfermedades metabólicas. Desde sus inicios, ha contribuido con encuestas nacionales de nutrición y asesoría alimentaria en distintas dependencias gubernamentales.
El INCMNSZ reafirma su compromiso con la atención médica de excelencia, la innovación científica y la formación de profesionales de la salud altamente capacitados. Su labor continúa siendo un pilar en la medicina mexicana, con una visión humanista y científica orientada a mejorar la calidad de vida de la población.
