_ La diputada Lizette Clavel (PT), presidenta de la Comisión de Desarrollo Económico, encabezó la octava sesión ordinaria de ésta
La Comisión de Desarrollo Económico del Congreso de la Ciudad de México emitió tres opiniones en sentido favorable a las iniciativas para reformar y adicionar diversos artículos de la Ley de Cultura Cívica, Ley Orgánica de la PAOT, Ley de Establecimientos Mercantiles y Ley de la Procuraduría Social, relacionadas con el funcionamiento de comercios.
Durante la octava sesión ordinaria de la Comisión de Desarrollo Económico, presidida por la diputada Lizette Clavel Sánchez, del grupo parlamentario del PT, las y los legisladores integrantes acordaron por unanimidad apoyar una iniciativa suscrita por el diputado Miguel Macedo Escartín (MORENA) en la que propone modificar diversos artículos de la Ley de Cultura Cívica, Ley Orgánica de la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial, Ley de Establecimientos Mercantiles y Ley de la Procuraduría Social, a fin de aumentar las sanciones a la contaminación por ruido.
Asimismo, se dio una opinión positiva a la iniciativa presentada por el diputado Eleazar Rubio Aldarán (MORENA) para adicionar el artículo 45 bis a la Ley de Establecimientos Mercantiles para legalizar las máquinas de videojuegos y electromecánicas de juegos instaladas en comercios, para incrementar sus ganancias.
Finalmente, se aprobó una opinión a favor de la iniciativa suscrita por el diputado Armando Tonatiuh González Case (PRI) para reformar y adicionar diversos artículos a la Ley de Establecimientos Mercantiles, para favorecer la instalación de cambiadores familiares en negocios comerciales.
Por sugerencia del diputado Carlos Castillo Pérez (MORENA) se solicitará a las comisiones dictaminadoras -de Administración Pública Local y la de Derechos Humanos- que determinen el mínimo de metros cuadrados y aforo de los establecimientos mercantiles para que esta norma sea obligatoria.
Asimismo, las diputadas Gabriela Salido Magos (PAN) y Paula Soto Maldonado (MORENA) propusieron revisar y cambiar la denominación de cambiadores familiares, por otro nombre más adecuado para estos espacios, que favorezca la equidad de género.
