_ Miles de personas salieron a las calles en más de mil 600 puntos de Estados Unidos para manifestarse en contra del presidente Donald Trump, evidenciando un rechazo masivo a sus políticas migratorias y recortes a programas sociales. Las protestas, agrupadas bajo el lema "Good Trouble Lives On", rindieron homenaje al fallecido congresista y defensor de los derechos civiles John Lewis.
La mayoría de las movilizaciones se enfocaron en denunciar las redadas antiinmigrantes, el despliegue de la Guardia Nacional y la reducción de fondos destinados a Medicaid y otras redes de apoyo para personas en situación de pobreza. Las ciudades de Atlanta, St. Louis, Oakland, Annapolis y Chicago fueron escenarios de actos de resistencia civil, con pancartas que exigían justicia social y respeto a los derechos humanos.
Lisa Gilbert, copresidenta de la organización Public Citizen, denunció que el país atraviesa uno de los momentos más peligrosos de su historia reciente. Acusó al gobierno de Trump de fomentar el autoritarismo y socavar principios fundamentales de la democracia estadounidense. Las manifestaciones buscan detener lo que consideran una escalada en la represión migratoria y el desmantelamiento de políticas sociales clave.
En Chicago, cientos de personas participaron activamente en la marcha en honor a Lewis, mientras en Nueva York se sumaron grupos con llamados a la acción contra las decisiones del segundo mandato de Trump. En el sur de California, la indignación creció tras arrestos masivos realizados en granjas, en operativos federales respaldados por el ejército.
Además de la tensión política, la Casa Blanca confirmó que el mandatario, de 79 años, padece insuficiencia venosa crónica. La enfermedad fue detectada tras presentar hinchazón en las piernas y ha sido calificada como una condición común por su vocera oficial.
