_ El Instituto Mexiquense de Salud Mental y Adicciones (IMSAMA) de la Secretaría de Salud del Estado de México subraya que desarrollar emociones positivas derivadas del amor y la amistad puede brindar múltiples beneficios a la salud. Según sus especialistas, reducir el estrés, mejorar la calidad del sueño y fortalecer el sistema inmunológico son algunos de los impactos positivos que una relación afectiva puede generar.
Contrario a la creencia popular que asocia el amor al corazón, la base fisiológica de este sentimiento se origina en el cerebro. Al experimentar atracción y apego, el organismo libera hormonas como la dopamina, responsable de la sensación de euforia; la oxitocina, llamada "hormona del amor" por fortalecer la confianza y la conexión social; y la vasopresina, relacionada con la excitación y el deseo de intimidad.
Estos procesos neuroquímicos inciden de forma favorable en la salud integral: mejoran la función cardiovascular, así como la apariencia de la piel, el cabello y las uñas. Además, favorecen la regulación de la tensión arterial y un óptimo desempeño de la función cognitiva, ayudando a la memoria y al aprendizaje. Asimismo, disminuyen la probabilidad de padecer depresión, elevan la tolerancia al dolor y aportan a la longevidad.
Con motivo del Día del Amor y la Amistad, el IMSAMA recomienda mantener relaciones afectivas a lo largo de la vida, ya sean románticas o no, para propiciar estados de relajación, crecimiento y restauración. Estas relaciones, a su vez, promueven el bienestar tanto físico como mental, impulsando una mejor calidad de vida.
