_ Manuel M. Ponce, considerado el padre del nacionalismo musical mexicano, será recordado en el marco del 74 aniversario de su muerte con un concierto a cargo de la mezzosoprano María Luisa Tamez, cantante solista de Bellas Artes, y el pianista Héctor Cruz, el domingo 24 de abril a las 13:30 horas en el Museo José Luis Cuevas, como parte del ciclo Los colores de la voz de la Coordinación Nacional de Música y Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) y en el marco de la estrategia #VolveAVerte de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
El programa está integrado por una parte de las obras del reconocido compositor mexicano, como Tres melodías italianas, las cuales escribió a partir de textos de importantes pensadores y poetas contemporáneos de su época: Forse, del filósofo Marco Lessona; Romanzetta, del poeta y novelista Lorenzo Stecchetti, y Ho bisogno, de Ada Negri, poeta y cofundadora en 1899 de la Unión Nacional de Mujeres.
Asimismo, Aleluya, cuya letra pertenece al poeta modernista Luis G. Urbina, y tres poemas de Enrique González Martínez: Nocturno de las rosas, Onda y Despedida. También han sido incluidas piezas para piano solo, como Malgré tout (A pesar de todo), dedicada al escultor Jesús F. Contreras.
María Luisa Tamez ha sido ganadora del Concurso Nacional de Canto Carlo Morelli en 1981. Fue elegida por Eduardo Mata para participar en las óperas Madama Butterfly, La traviata, Suor Angelica y Falstaff. Ha cantado en Inglaterra, Francia, España, Portugal, Japón, Alemania y Nueva Zelanda con orquestas como la Filarmónica de París y la Royal Philharmonic.
Héctor Cruz es egresado de la Escuela Nacional de Música (ahora Facultad de Música) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde actualmente es académico. Realizó una gira por Francia y Finlandia como pianista de la agrupación Voz en Punto. Es pianista del Coro de Madrigalistas de Bellas Artes y director de la Orquesta de Cámara y Ensamble Vocal Colegium Musicum de la Ciudad de México.
El acceso será gratuito. Habrá un estricto apego a las medidas de protección para artistas, trabajadores y asistentes, las cuales consisten en la instalación de un filtro con tapete desinfectante, aplicación de gel antibacterial, revisión de la temperatura que no rebase los 37.5ºC, uso obligatorio de cubreboca al momento del acceso y durante la función, y respeto a la sana distancia. El cambio de programación está sujeto a las condiciones sanitarias establecidas por las autoridades de las secretarías de Salud y de Cultura del Gobierno de México.
