_ Las niñas y los niños “gritones” dieron a conocer al número ganador: 23173; las dos series fueron adquiridas en la Ciudad de México
Con el Sorteo Superior 2731, la Secretaría de Cultura del Gobierno México, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y la Lotería Nacional, conmemoraron este viernes 29 de julio el Centenario del Muralismo, uno de los movimientos artísticos más importantes en México y América Latina, en el Salón de Sorteos del edificio El Moro.
Con el clamor de las niñas y los niños gritones, el número de la Lotería premiado este viernes fue el 23173, cuyas dos series se vendieron en la Ciudad de México, con un monto de 17 millones de pesos, además de una bolsa total de 51 millones para una emisión de 60 mil números.
Tras dar la bienvenida, Sonia Leticia Martínez Patiño -en representación de la directora general de la Lotería Nacional, Margarita González Saravia Calderón- rememoró los recintos intervenidos por los primeros muralistas, y acotó que al concluir la construcción del Palacio de Bellas Artes estaba vigente el espíritu revolucionario y este nuevo recinto parecía ideal para impulsar la agenda cultural del momento, en la que prevalecía una intensión de regenerar y fortalecer la identidad de México a través de la cultura.
Este nuevo recinto, dijo, mostró también lo que en ese tiempo era la máxima representación de la plástica nacional, encontrada en su máximo apogeo: Rivera, Orozco y Siqueiros, tres grandes exponentes de este movimiento.
A nombre de la secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, y de la directora general del Inbal, Lucina Jiménez López, la subdirectora general de Bellas Artes, Laura Ramírez Rasgado, agradeció la hospitalidad y solidaridad de la institución, ya que con la emisión de este billete se evoca uno de los movimientos artísticos más importantes de México y América Latina.
Compromiso, identidad, nacionalismo, indigenismo, expectativas sociales, derechos de los sectores populares, visibilización de la lucha de clases, arte público y tradiciones populares han sido los componentes, entre otros, de una corriente que no solo fue artística, sino que representó un movimiento político, agregó Ramírez Rasgado.
Al referirse al gran promotor del muralismo mexicano, afirmó que se reunieron con José Vasconcelos, los pintores Diego Rivera, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros, Roberto Montenegro, Ramón Alva de la Canal, Fermín Revueltas, Fernando Leal y Jean Charlot., quienes para 1922 estudiaron y trabajaron para crear un estilo que reflejara la historia del pueblo mexicano, desde la época precolombina hasta la Revolución, con escenas de un realismo vigoroso y popular y de colores vivos.
Mencionó que otros muralistas orientaron su producción artística a temas más universales, como José Clemente Orozco, González Camarena y el propio Rufino Tamayo, que buscó un camino en el que conjugó el arte prehispánico con las vanguardias internacionales del siglo XX.
Por último, invitó a las y los asistentes a conocer la obra que resguardan el Palacio de Bellas Artes, el Museo Mural Diego Rivera y el Palacio Nacional, y agradeció a la Lotería Nacional por este recordatorio histórico de la fuerza creativa del muralismo mexicano y sus protagonistas, que nos ha congregado para acercarnos al inmenso y diverso patrimonio que es la herencia cultural de todos los pueblos del mundo.
El muralismo mexicano nace con la intención de expresar la realidad de las condiciones del país durante la Revolución Mexicana, además de que rechazaba cualquier pintura tradicional de caballete y de los círculos intelectuales hegemónicos de aquellos años.
