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- Su adhesión permitirá apoyar en las próximas décadas, los desafíos más importantes para los sistemas agroalimentarios
- El crecimiento que ha tenido la acuicultura en las últimas décadas indica la necesidad de adoptar políticas integradoras
La senadora del PRI, Diva Hadamira Gastélum Bajo propuso exhortar al titular del Poder Ejecutivo Federal, para que por conducto de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), México se adhiera a la Convención para el Establecimiento de la Red de Acuicultura de las Américas (RAA) o Convención de Managua.
La adhesión de México a la RAA permitirá apoyar en las próximas décadas uno de los desafíos más importantes para los sistemas agroalimentarios del mundo, que será el asegurar el abasto suficiente de alimentos para su población.
Aunque México ha sido uno de los países más involucrados desde el inicio en la construcción de la RAA, no ha firmado su adhesión a este estratégico organismo intergubernamental de cooperación regional como miembro cooperante, subrayó la legisladora.
Los principales beneficios para México, como miembro efectivo de la RAA, serían: formación de recursos humanos y capacitación; desarrollo de actividades de investigación conjunta; intercambio de información respecto a tecnologías de producción, sanidad, inocuidad, y fortalecimiento de aspectos regionales de economía y mercadeo.
Informó que la RAA es un mecanismo formal regional, que permite expandir el sector acuícola de una manera económica y ambientalmente sustentable, promueve la calidad de los productos y la salud de los organismos acuáticos a partir del ámbito nacional y hacia el ámbito regional y mundial.
El crecimiento que ha tenido la acuicultura en las últimas décadas, los pronósticos de su expansión en la región, y la importancia social del pequeño productor como alternativa para la generación de ingresos y el fortalecimiento de la seguridad alimentaria, son factores que indican la necesidad de adoptar políticas integradoras, puntualizó.
El documento se envió a la Tercera Comisión de la Permanente.
