_ El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) felicitó al historiador Sergio Hernández Galindo, investigador de la Dirección de Estudios Históricos (DEH), quien fue distinguido por el gobierno del Japón con la Orden del Sol Naciente, Rayos de Oro con Collar de Listón, una de las condecoraciones más antiguas y prestigiosas del país asiático. Este reconocimiento se otorga a personalidades extranjeras que han contribuido al entendimiento mutuo entre Japón y otras naciones.
La distinción reconoce la labor de Hernández Galindo en el fortalecimiento de los lazos académicos y culturales entre México y Japón, así como su extensa trayectoria en la investigación sobre migración japonesa, memoria histórica y educación para la paz. Economista por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y especialista en estudios asiáticos por El Colegio de México, el investigador ha dedicado más de tres décadas al estudio de las relaciones diplomáticas, sociales y culturales entre ambas naciones.
Entre sus obras más destacadas se encuentran La guerra contra los japoneses en México (2011), un análisis sobre las políticas de control y concentración aplicadas a ciudadanos de origen japonés durante la Segunda Guerra Mundial, y Hibakusha. Testimonio de Yasuaki Yamashita (Fondo de Cultura Económica, 2021), donde rescata la voz de un sobreviviente de Hiroshima y su mensaje a favor del desarme nuclear y la paz mundial.
“Este reconocimiento refleja la alta consideración que Japón tiene hacia la labor que realizamos en el INAH y, en particular, en la DEH, en favor del estudio y la preservación de la memoria compartida”, expresó Hernández Galindo. Por su parte, la titular de la DEH, Delia Salazar Anaya, destacó que su trabajo ha sido clave para consolidar un campo de estudio que une historia, antropología y diplomacia cultural, abriendo nuevos espacios de colaboración entre México, Japón y América Latina.
La Orden del Sol Naciente simboliza la gratitud del pueblo japonés hacia quienes promueven la cooperación científica y cultural entre civilizaciones. Para el INAH, este reconocimiento reafirma el valor de la investigación humanística como una herramienta para la paz, la empatía y el entendimiento global.
