_ Con una amplia diversidad de actividades artísticas y culturales que llenarán de alegría, colores, formas, aromas y sabores el Barrio de San Ángel, la Delegación Álvaro Obregón celebrará del 15 al 23 de julio la 160 edición anual de la tradicional “Feria de las Flores”.
La Jefa Delegacional María Antonieta Hidalgo Torres recordó que la Feria de las Flores es una de las celebraciones más antiguas de la Ciudad de México, y una de las tradiciones más hermosas y de mayor arraigo en Álvaro Obregón, que cada año es disfrutada por miles de vecinos de esta comunidad y del resto de la Ciudad de México, así como turistas nacionales y extranjeros.
Adelantó que este año el festejo presentará una amplia variedad de actividades culturales en 8 diferentes sedes, que incluyen el Parque de la Bombilla, el Museo de El Carmen, la Casa de Cultura Jaime Sabines, el Museo Casa-Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, el Museo Casa del Risco, la Plaza de San Jacinto, la Plaza Tenatitla y el Centro Cultural San Ángel.
Concursos de balcones floridos, rebozos, bicicletas y triciclos decorados con flores, exposiciones de pintura y escultura, conferencias, concurso de pintura, exposiciones de flores medicinales, cactáceas, orquídeas y dalias, talleres gastronómicos y de artes plásticas, y un recorrido de San Jacinto al Parque de la Bombilla con el estandarte de la Virgen, las princesas de la feria y comparsas, son sólo algunas de las actividades que abarca el programa de esta feria.
Asimismo, se presentarán conciertos de grupos musicales, como La Sonora Dinamita de Lucho Argaín, Los Askis, Rubén Pavón ex vocalista de Grupo Cañaveral y la Orquesta de Cámara de la Ciudad de México, tunas, estudiantinas, duetos, cuartetos de cuerdas, coros, ballet regional, mariachis, danza contemporánea, ballet clásico, danzas árabe, egipcia, polinesia y boliviana, así como exhibiciones de tango, salsa y bachata, destacando la presencia de la Escuela de Ballet Folklórico de Amalia Hernández.
Con respecto a la tradición de la Feria de las Flores, cabe señalar que la celebración inició formalmente en 1857, cuando el entonces presidente de la República Mexicana, Ignacio Comonfort expidió un decreto para autorizar una feria anual en la Villa de San Ángel, a fin de oficializar una tradición que comenzaron los Frailes Carmelitas Descalzos a principios del siglo XVII en Tenanitla, nombre náhuatl de este barrio, que significa “bajo el volcán” o “en el muro de piedra”.
Por su ubicación al pie de las montañas y su agradable clima, Tenatitla desde el siglo XVI era un importante sitio de veraneo para las familias adineradas de la capital. Sus tierras eran cruzadas por varios riachuelos y albergaban cultivos de indios y españoles.
En 1597 los Frailes Carmelitas comenzaron a fertilizar, nivelar e irrigar las tierras de esta zona, aprovechando las aguas del río de la Magdalena, para crear los huertos y jardines floridos que establecían junto a todas sus fundaciones. Su huerta sirvió de ejemplo a la comunidad, y pronto la villa se convirtió en un lugar lleno de cultivos de flores y frutos, que cada mes de julio presumían durante los festejos de la Virgen del Carmen.
La celebración tiene también un origen prehispánico, relacionado con el culto a Xiuhtecuhtli, señor de las flores, a quien los habitantes de Tenanitla ofrendaban para agradecer su protección a sus cosechas de flores y frutos.
Los Carmelitas Descalzos vincularon este rito con el culto a la Virgen del Carmen, haciendo coincidir los festejos y originando un sincretismo religioso.
En 1987 el Instituto Nacional de Antropología e Historia decretó a San Ángel como Zona de Monumentos Históricos, en 2010 fue declarado Patrimonio Tangible e Intangible de la Ciudad de México, y en 2013, la Feria de las Flores fue nombrada Patrimonio Cultural Intangible de la Ciudad de México.
