_ Como parte de las acciones emergentes de conservación que realizan especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el patrimonio cultural afectado por el sismo del pasado 19 de septiembre, el archivo parroquial del Ex Convento de San Juan Bautista, en Yecapixtla, Morelos, fue reubicado luego de que una parte de los muros de la oficina que los albergaba se viniera abajo.
El acervo está integrado por 60 cajas de expedientes, algunos de ellos de más de 300 años de antiguedad, dividido en dos secciones: el archivo histórico y el contemporáneo.
El primero reúne documentos que datan desde 1642 hasta finales del siglo XIX, entre los que se encuentran libros de nacimientos, defunciones, matrimonios, textos de organizaciones religiosas, cofradías, actas disciplinares, reglamentos y una colección de libros de los siglos XVIII y XI También se incluyen folios sueltos entre los que destaca uno de 1891 donde se consigna la instauración del obispado de Cuernavaca, el cual presenta el listado de las parroquias que la integran, entre ellas la de Yecapixtla. El segundo apartado reúne documentos de los siglos XX y XXI.
La restauradora Teresita Bernarda Díaz Villanueva, responsable del Programa Nacional de Conservación del Patrimonio Documental, de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural, informó que el acervo se encuentra en perfecto estado de conservación, porque al momento del derrumbe estaba dentro de un librero que lo protegió y las cajas sólo tenían una capa de polvo que fue retirada al momento del traslado.
“La reubicación del acervo era fundamental, no sólo para la conservación del patrimonio documental, sino porque el archivo está en constante consulta. Muchas personas solicitan su fe de bautismo o actas de matrimonio para efectuar otros trámites civiles, y el hecho de que los documentos estuvieran en un espacio restringido a causa del derrumbe evitaba que se pudiera consultar”.
Por el momento, el archivo está situado en una habitación anexa al ex convento, la cual cuenta con las condiciones adecuadas de conservación y donde se colocaron cuatro cuerpos de estantería tubular.
La restauradora indicó que el archivo fue localizado durante las visitas de inspección realizadas por los restauradores del INAH, luego del sismo.
