_ La participación de niñas, niños y adolescentes con sus observaciones, críticas y sugerencias en temas que les atañen, es un principio permanente y continuo de su expresión libre e intervención activa; a los que de manera informada opinan se les escucha y toma en cuenta en los asuntos que les impactan en cualquier ámbito de su vida.
Así lo señaló la directora del Programa Nacional de Protección de la Secretaría Ejecutiva (SE) del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), adscrita a la Secretaría de Gobernación, Tania Jiménez Romano, quien recordó que en la Convención de los Derechos del Niño de Naciones Unidas (CDN, capítulo Décimo Quinto de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (LGDNNA), mandata que las autoridades deberán promover la intervención e incorporarla en el diseño de políticas públicas de este sector de la población.
Durante la séptima sesión temática del Grupo de Trabajo de Territorialización, del Grupo Interinstitucional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (GIPEA), Jiménez Romano expuso, ante integrantes estatales de las 32 entidades federativas que lo conforman, que las premisas que sostienen la participación de niñez, adolescencia y juventud, tienen en cuenta que:
- Son personas en igualdad de condiciones respecto de las personas adultas, pero con derechos específicos
- Son capaces de formar juicios e ideas propias, opinar y expresarse en función del grado de desarrollo que hayan alcanzado
- Son protagonistas de sus propios derechos y los pueden exigir
- Para garantizar su participación desde las instituciones se requiere de personal especializado y de mecanismos formalmente instalados
La servidora pública enfatizó que existen eventos adultocéntricos que se hacen con mentalidad y para beneficio de las personas adultas, donde se usa a niñas, niños y adolescentes como adornos, se les folkloriza, se les imponen opiniones ajenas que no son suyas ni de su edad, y solo se simula que participan.
La participación real se debe dar con enfoque de derechos de niñez y adolescencia mediante un diálogo donde efectivamente se les escuche, donde presenten iniciativas -incluso con juegos-, y donde se trabaje en equipo con afectividad, destacando como mecanismos para su participación los diálogos intergeneracionales, los foros presenciales y las encuestas y sondeos como los OpiNNA, los Consejos y las expresiones gráficas, indicó Ramírez Jiménez.
La servidora pública aclaró que con las opiniones y propuestas que resultan de la participación de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, se articulan o crean iniciativas para generar políticas públicas, se priorizan y aceleran acciones ya contempladas, se incluyen sus ideas en planes, programas y se visibilizan sus temas de interés.
Jiménez Romano subrayó, como ejemplo de incorporación de la participación de sector en asuntos de su incumbencia, el sondeo ‘OpiNNA ¡Que buen Plan!’, donde intervinieron 146 mil niñas, niños y adolescentes de entre 8 y 17 años, destaca que sus opiniones y sugerencias se incorporaron al Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 (PND) en el Anexo XVIII-Bis (pág. 200-201), con algunos de los siguientes puntos:
1. Acabar con la corrupción, enseñar desde niñas y niños la honestidad
2. Legalizar la interrupción del embarazo
3. Diseñar campañas para prevenir el embarazo de jóvenes en escuelas
4. Fomentar el aprendizaje sobre tecnologías de la información
5. Fomentar la resolución pacífica de conflictos en las aulas
En la sesión también participaron la directora de Coordinación Sectorial y Regional del Instituto Mexicano de la Juventud, (Imjuve) Nayeli Yoval Segura, la asociada nacional de Salud Sexual y Reproductiva, Juventud y Poblaciones Vulnerables del Fondo de Población de Naciones Unidas, (UNFPA) Gabriela Rivera Reyes, y la directora general de Elige Red de Jóvenes por los Derechos Sexuales y Reproductivos, A.C., Valeria Vásquez Vázquez.
