_ Con su permiso, ciudadano presidente, diputado Trujillo, con todo respeto, le digo que no es un atrevimiento venir a esta tribuna. Para mí es un honor traer la voz del gobierno federal y cumplir con una instrucción precisa del señor presidente de la República, porque de lo que se trata, es de construir también una nueva cultura política.
Fíjese que las vueltas que da la vida, por ahí de 2009 tuve la fortuna de ser diputado federal en la LXI Legislatura, ahí coincidía, entre otros, con Dolores del Río, que ahora es secretaria en el gabinete del gobernador Durazo. Recuerdo a Pompa de Sonora y ahí era legislador, el hoy diputado local, Ernesto de Lucas Hopkins.
Fíjese diputado, que a los hombres de Estado, se les reconoce por la capacidad que tienen de admitir, qué en ocasiones, pudieron haber equivocado el diagnóstico y son capaces de rectificar el camino. De ese tamaño, es el presidente Andrés Manuel López Obrador, un hombre de Estado a la altura de lo que el país requiere.
Y la verdad, que me da gusto después de tantos años, volverlo a encontrar, recuerdo que una vez quise hacerle una pregunta en tribuna y cómo se acostumbraba en las viejas épocas, pues usted se negó a aceptarlo. Ahora me lo encuentro, que ya le han escriturado el monopolio de la razón y el corazón de las familias sonorenses como usted dijo.
Fíjese que, y es un ejercicio de memoria, sus hoy compañeros de Movimiento Ciudadano acompañaron de inicio este proyecto de transformación. Algún día le platicaré, cuáles creo yo, que son las razones porque ellos decidieron apartarse de la construcción y de la transformación de este país.
Yo, y se lo digo con todo respeto, pues me gustaría que la próxima ocasión que nos encontremos, me explique usted si no hay responsabilidad de las autoridades municipales, no hay responsabilidad de las autoridades estatales, infiero que usted dice que tampoco de las autoridades federales. Pues explíquenos usted, a quién le echamos esa responsabilidad, a lo mejor a la Divina Providencia, lo cierto es que sí hay responsabilidades de los tres órdenes de gobierno y por eso no le hemos ganado del todo la batalla a la inseguridad.
No se trata de militarizar, no se trata de que campee el verde de los uniformes militares y mucho menos de la bota militar, ya les explicaba hace un rato que eso afortunadamente en este país ya quedó muy por atrás. Pero tampoco la solución, la vamos a encontrar si frotamos la lámpara de Aladino, ni nos va a llegar por generación espontánea.
Necesitamos un trabajo profesional y necesitamos de decisiones de política pública en materia de seguridad a la altura de las circunstancias, a la altura de lo que requiere este país.
Esas Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública, que usted, o a las cuales usted le dice que no, es un discurso muy elegante porque es como el del doble rostro, por un lado, dicen que quieren a las Fuerzas Armadas y por el otro, pues le niegan la oportunidad al pueblo de México, que nuestras fuerzas, que es la única fuerza profesionalmente capacitada en este momento para prestar servicios de seguridad pública en el país, lo haga.
Pues si no es con las Fuerzas Armadas, a lo mejor, y no soltando la lámpara de Aladino, pues a lo mejor es un asunto de generación espontánea.
Pero, mire, esas Fuerzas Armadas hoy tienen en Nuevo León, que por cierto, gobierna Movimiento Ciudadano –no voy a hablar mucho del gobernador Samuel García porque hoy que platiqué con él por teléfono, acordamos políticamente darle un poco la vuelta a la página y seguir construyendo por Nuevo León y por el país–, pero esas Fuerzas Armadas hoy tienen casi el triple de efectivos coadyuvando en Nuevo León, básicamente, en la Zona Metropolitana de Monterrey, donde también hay un presidente municipal emanado de Movimiento Ciudadano, sustituyendo las tareas que debiera realizar el cuerpo policiaco civil, que se llama ahí en Monterrey, Fuerza Civil, que dispone de un poco menos de la mitad de los elementos que las Fuerzas Armadas han destinado a Nuevo León. Y que, aunque parezca en tono de burla, pues los tienen nada más cuidando los Oxxo y los 7-Eleven ahí en Monterrey, y menciono a los dos porque ya se quejaron igual los de la primera cadena comercial.
Y ya no hablemos de Jalisco, donde la violencia y la inseguridad campean por todos los rincones del estado. Ahí, por cierto, también gobierna Movimiento Ciudadano. Ahí, por cierto, se le acaba de fincar responsabilidad –entiendo– al secretario o director de Seguridad Pública porque se le acusa de tener vínculos con el crimen organizado.
Pero, esos son solamente dos ejemplos de lo que necesitamos todos para que recuperemos la paz y la tranquilidad en el país.
También podría yo decirle del enorme esfuerzo que realiza el gobernador Durazo y su equipo de trabajo, porque lo que dijo la diputada es cierto. Se ha abatido el índice delincuencial aquí en Sonora y lo ha hecho con una policía profesional; ha venido depurando.
La generación espontánea esa, que yo le decía, pues se la convertiría en otra narrativa. ¿A poco cree usted que el tiradero de inseguridad que encontró el gobernador Durazo surgió por generación espontánea? Pues, no, este vino incubándose a lo largo de los años.
Por cierto, usted sabe del tema porque usted fue secretario de Seguridad Pública con el gobernador Bours, si mal no recuerdo. Pero, no se trata ya de buscar culpas ni de repasar el pasado.
Hace rato decía que cuando uno se pone a lamer las heridas, pues más tardan en cicatrizar. Yo le hago un exhorto a la reflexión, usted es un político preparado, fue secretario de Educación, sabe de lo que estamos hablando en este congreso, y sabe lo que representa la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
No se preocupe, así como usted ahora está en esa encrucijada, pues nosotros también lo pasamos, y fuimos oposición y oposición de adeveras y pusimos nuestro granito de arena para construir este país. No le va a pasar nada si difiere de la instrucción del dirigente nacional de Movimiento Ciudadano.
A la legisladora Alejandra López, fíjese que reconozco la claridad de su exposición; yo solamente le haría una observación. Usted habla aquí de que se van a destinar doscientos y tantos mil millones de pesos en el 2023 para las Fuerzas Armadas, pues de eso, ni usted ni el gobernador Durazo, ninguno de los legisladores, ninguno de los que hoy nos acompañan en esta tribuna podemos saber por una simple y sencilla razón: aún no se discute y mucho menos se aprueba el proyecto de Presupuesto de Egresos en la Cámara de Diputados federal.
Cuando esto suceda, pues entonces ya podremos hablar con más claridad de los números destinados a las tareas de seguridad pública. En tanto, pues yo también le llamaría a la reflexión. Es la hora pues, de construir entre todos la seguridad que tanto anhelamos.
Terminaría, ahora sí, con un verso de Pellicer, porque sé que al gobernador Durazo le gusta que lo cite. Y hay una escena de cuando Carlos Pellicer va a obsequiarle un anillo a Frida Kahlo, y le dice, es un anillo que representaba el cero maya, y le dice, y cabe para la ocasión, “toma esta nada y póntela en un dedo, nada en un dedo llevarás sin miedo”. Muchas gracias a todas y a todos ustedes.
