_ Luego de las observaciones del físico Christiaan Huygens en 1665, el científico mexicano y un grupo de expertos, explicaron de manera rigurosa la simpatía de los relojes de péndulo
En 1665 el físico neerlandés, Christiaan Huygens, observó que dos relojes de péndulo, colgados de la misma estructura de madera, oscilaban de manera sincronizada. En ese entonces, a falta de la existencia de matemáticas necesarias, como el cálculo diferencial, el científico atribuyó el fenómeno a cierta comunicación entre los relojes, debido a las vibraciones que presentaba el soporte que los sostenía, nombrándolo a€œsimpatíaa€.
163501Relojes diseñados para el experimento del Dr. Peña RamÃŒrez
Más de 350 años después, el Dr. Jonatan Peña Ramírez, joven catedrático Conacyt, adscrito al Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE), pudo explicar por primera vez y de manera rigurosa, que el físico del siglo XVII se encontraba en lo correcto.
a€œMi investigación analiza este fenómeno que se encuentra en la naturaleza, tanto en organismos vivos como en cosas inertes, llamado sincronización. Esto sucede cuando dos o más cosas coinciden en un ritmo armoniosoa€, contó en entrevista el Dr. Peña Ramírez.
Aunque Christiaan Huygens descubrió la sincronización de manera fortuita, pues buscaba la solución a otro problema de investigación, el hallazgo representó el primer paso para explicar por qué dos sistemas oscilantes que interactúan entre sí, ajustan sus ritmos de manera espontánea.
a€œEn los tiempos de Huygens, no existía el cálculo diferencial, pero él era tan brillante que pudo explicar el fenómeno sin una sola ecuación y concluyó que sus relojes sentían simpatía el uno por el otro debido a la comunicación que tenían a través de la barra de la que estaban colocados, pero era una explicación empírica y hacía falta explicar eso de manera rigurosa y en términos más científicosa€.
A partir de los resultados de su investigación, el Dr. Peña Ramírez mencionó que éstos podrán ayudar a explicar la sincronización en otros campos del conocimiento, como la biología o las ciencias de la salud.
a€œEste fenómeno se encuentra en bastantes aplicaciones, tanto en desarrollos tecnológicos como en nuestra vida. Está presente, por ejemplo, en las células del corazón, las cuales tienen que contraerse rítmicamente y al mismo tiempo para no generar una arritmiaa€, detalló.
Asimismo, se ha encontrado que una de las causas por las que una persona sufre epilepsia, es que en alguna parte del cerebro las neuronas se sincronizan. a€œNosotros como investigadores, queremos entender ese fenómeno, A¿por qué pasa y cuándo pasa?a€, relató el experto.
El equipo de trabajo que acompañó al científico mexicano durante su investigación, estuvo conformado por el Dr. Joaquín Álvarez del CICESE, quien fungió como responsable técnico del proyecto; el Dr. Henk Nijmeijer de la Universidad de Eindhoven, Holanda y el arquitecto Luis Alberto Olvera de Relojes Centenario, éste último encargado de diseñar los relojes utilizados en el experimento.
La vinculación del sector industrial con el académico fue el a€œingrediente clavea€ de la investigación, aseguró el Dr. Peña Ramírez, pues aunque para él a€œes muy complicado que la industria en México se involucrea€, el trabajo contó con este elemento adicional.
Por otro lado, la siguiente etapa de la investigación consistirá en analizar posibles aplicaciones tecnológicas, a€œahora que podemos comprender el fenómeno de que nada ni nadie puede forzar a los relojes a que se sincronicen y que ocurre de manera natural, lo que sigue es ver su aplicación en cuestiones tecnológicas, tal como controlar las vibraciones en algunas estructurasa€, señaló el científico.
La investigación titulada "Sincronización de sistemas dinámicos interconectados: aplicaciones en física, biología e ingeniería", ha sido publicada en diversos medios nacionales e internacionales, entre los que destaca la revista Scientific Reports del grupo editorial Nature; Discovery News y el diario ABC, por mencionar algunos.
El Dr. Jonatan Peña se hizo acreedor a una Cátedra Conacyt en septiembre del 2015, después de realizar estudios de posdoctorado en la Universidad de Tokio y en el CICESE.
Para el joven, las Cátedras Conacyt resultaron un programa que permite abrir las puertas a jóvenes para que se incorporen a universidades o centros de investigación mexicanos. a€œUna vez que sales al extranjero a prepararte, es muy difícil tratar de regresar a México y encontrar alguna plaza, pero las Cátedras Conacyt hacen atractivo volver al país, pues te ofrecen trabajo en lo que te gusta hacer, y lo que nos gusta hacer es investigara€, concluyó.
